martes, 6 de noviembre de 2012

No tengo palabra

Definitivamente no tenemos palabra. Llevo un tiempo diciendo que a partir de ahora no pensaba ir a todas las reuniones del colegio (cuando digo todas, hay que leer toooooodas), que eran demasiadas y que la vida no nos daba para más. Recuerdo incluso haberlo comentado en este blog (perdonadme, pero no tengo ganas de ponerme a buscar la entrada, marcarla, ir al botoncito de "Enlace", clicar, pegar y escribir el texto que quiero que aparezca) por lo que un hipotético comportamiento contrario a lo manifestado me haría quedar como un hombre sin palabra.

El sábado por la noche vino a cenar a casa nuestro amigo M., que además de amigo -casualidades de la vida- es el profesor y tutor de JP, por lo que "aprovechamos" esa cena para hacer la tutoría de JP. En un momento de la conversación salió el tema de la reunión prevista para el día 5 de noviembre (sí, sí, ayer) y al verme reacio a asistir, con la boca pequeña, eso sí, dijo que nosotros mismos, que entendería que no asistiéramos. No nos dijo expresamente que no lo hiciéramos, pero podía entenderse como un "permiso tácito" a ello.

Empezaba yo a tener fama de incumplidor de principios, pues hasta ahora creo que he asistido a todas las reuniones del colegio del primer trimestre (puede ser que a la S. no, pues no recuerdo haber estado en su aula), cuando se presenta la ocasión ideal que reafirmarme en mi idea y demostrar al mundo que si digo una cosa, la cumplo. La cita era ayer, a las 20:30 horas. A. y yo teníamos que ir a Barcelona a hacer unas gestiones para Primogénito, lo cual suavizaba mucho la no asistencia a la reunión. Vamos, para entendernos, teníamos una excusa y no sería necesario, llegado el caso, dar ninguna explicación.

Estaba yo en casa cuando llegó JP del cole. Me da un beso y me dice "Hoy hay reunión en el cole". ¡Dios mío, ¿por qué todo es tan difícil?! Me armo de valor y le digo "Pues me parece que mamá y yo no podremos ir" Se hace el silencio. Como pasa el tiempo sin que diga nada y una vocecita (la conciencia supongo) empieza a martillearme en mi interior, con una gran sonrisa en mi cara le suelto "No pasa nada si no vamos, ¿verdad?" ... Me mira (soy incapaz de adivinar qué pasaba por su cabeza) y me dice "Me destrosarías el corasón"

A las 20:30 h, corriendo desde Barcelona, llegamos a la reunión del cole y vimos el dibujo que nos había preparado con todo su cariño. Entendí eso de "destrosarle el corasón", aunque lo que quedó destrozada fue mi coherencia. Desde ya soy un hombre sin palabra.

19 comentarios:

  1. Pater, Forrest Gump y yo solo vamos a las reuniones que pueden provocar "corasones destrosados", por si te sirve.
    Ah! Y gracias por el enlace ;D

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    1. jajajajaja ¿y cuándo a todos les provoca esos "destrosos" qué hacéis?

      De nada, es lo menos que podía hacer.

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    2. Jeje, hace dos años, 7 en el primer trimestre. Este año solo 5.

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  2. Bendita incoherencia,
    bendita falta de palabra.

    Me recordó la parábola que contó Jesús de los dos hijos, el malo que le dice al padre "sí" pero luego hace "no" y el bueno que le dice "no" pero al final hace "sí".

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    1. Ya me gustaría parecerme a ése que dijo que no, pero fue (por cierto, mi madre decía eso mismo de mí)

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  3. un aplauso a la no coherencia de corazón grande.

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  4. Ains, Pater... cómo me alegro de que faltases a tu palabra... y no destrosaras ese corasssón...

    Cómo se puede negar uno a eso?

    Si es que... son especialistas en chantaje emocional...

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  5. jajajaja Esos silencios...espesos, espesos.
    Y tú ahí viendo a ver como haces filigranas para encajar agenda jajajajja
    De vez en cuando hay que faltar a la palabra para no partir corasssonesss.
    Besazo

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    1. Esos silencios a veces son peores que los chantajes emocionales.

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  6. Pobre, mira que pensar en dejarle el dibujo colgado...
    Mi madre iba a cuantas menos reuniones del colegio mejor (soy la pequeña con diferencia, y esa época ya había pasado), y no es que esté precisamente traumatizada, pero procuro no perderme ni una de los míos. Me gusta.

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    1. No sabía que nos había dejado un dibujo (aunque me lo podía haber imaginado)

      Te entiendo perfectamente. Muchas veces son los pequeños los que salen peor parados

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  7. Esto viene a colación de la rigidez del post anterior. No hay que ser rígido y, aunque se tome una decisión, hay agunas que se pueden cambiar, que se deben cambiar.

    Qué envidia, por otro lado. En mi cole no debemos gustar los padres, porque apenas hay una reunión de clase al trimestre en la que nada se dice, cada vez vamos menos padres y no se les echa de menos. Salvan al cole sus profes, porque .......

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    1. ¡Es verdad! A ver si al final no soy tan rígido ;-)

      Oye que una reunión al trimestre es lo mismo que tenemos nosotros, lo que pasa es que al tener 6 niños, al final son muchas reuniones.

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  8. 25 annversario de bodas de Sunsi y J. ...(pásalo)

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    1. ¿Cuándo? ¿hoy?

      Gracias (aunque no sé dónde felicitarla)

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