viernes, 30 de marzo de 2012

¿Cuánto costará el cine?

La entrada de hoy es de esas que a medida que la vas escribiendo te vas arrepintiendo de ello por sentirte, no ya mayor, sino viejo.

Esta mañana guardaba dos billetes de 5 euros en mi cartera y, pensando en su valor en pesetas (ya no lo hago muy a menudo, pero hoy, no sé por qué, sí) me han venido varios recuerdos de mi infancia relacionados con el dinero. El primero de ellos es de cuando Primogénito y yo fuimos un año solos   a la feria que se montaba en nuestra ciudad por la Fiesta Mayor y, entre atracciones y tómbola, nos gastamos 500 Ptas. No recuerdo exactamente la edad que teníamos, pero estaría entre los 12 y 13 años. Lo que sí recuerdo es la bronca que recibimos en casa al llegar, cómo nos mandaron a la cama castigados y cómo mi abuela (vivía con nosotros) vino a nuestro dormitorio a escondidas de mis padres para mimarnos un poco. Después de decirnos que debíamos ser menos derrochones y hacerle prometer que no lo haríamos más, no se le ocurrió mejor cosa para animarnos que decirnos que en su época, con 500 Ptas. te comprabas una casa. Lejos de animarme, me hundió un poquito más y me hizo sentir el ser más manirroto sobre la faz de la Tierra.

El otro recuerdo monetario es de mi Primera Comunión (ahí sí que me acuerdo, corría el mes de mayo de 1975). Antes de ir a la Parroquia llegaron a casa varios familiares y uno de ellos -delante de todo el mundo- me llamó y me dijo "Paterfamilias (era un visionario), ven para acá" y abriendo su cartera sacó un enorme billete verde de 1.000 Ptas y me lo dio. Me sentí el niño más rico sobre la faz de la Tierra.

El último de los recuerdos es de una tarde de fin de semana en el Club de Tenis del que éramos socios. Mientras los niños practicábamos deporte o jugábamos a cualquier cosa y los padres jugaban a tenis, las madres estaban en el Club social (el edificio del Club) hablando sin parar. Esa tarde, no sé muy bien por qué, estaba yo por ahí y las madres hablaban de la carestía de la vida. Es entonces cuando oí a mi madre decir lo siguiente "Sí, sí que está todo muy caro. A este paso, cuando nuestros hijos quieran ir al cine, tendremos que darles 1.000 Ptas" "¡Qué exagerada eres!", dijo alguna y, enseguida, replicó "¿Que no? Ya verás, entre el cine y algo para un frankfurt ... ya verás" Pasado el tiempo, cuando ya iba al cine, me acordaba de mi madre y puedo decir que se quedó corta en sus predicciones.

No sé exactamente lo que cuesta el cine ahora, pero me imagino que una entrada no bajará de 6 € (ya tenemos las 1.000 Ptas.), así que si además quieres tomarte algo, la cosa se dispara.

¿Qué cantidad debo yo vaticinar para mis hijos?

Como ya os adelanté hace unos días, acabaré mi repertorio de BSO y después ya veremos si seguimos o no. Para hoy os tengo preparada el tema de la película "Barry Lindon", película que no he visto, pero cuya música oí por primera vez cuando era pequeño y me encantó.




jueves, 29 de marzo de 2012

Huelga general

Hoy he estado en el Colegio de Abogados de mi ciudad y en el Registro de la Propiedad nº 3. He recibido visitas y he realizado llamadas telefónicas. Todo ha sido normal. Sin embargo, creo que hoy ha habido una huelga general. ¿Que cómo lo sé? Pues porque cuando iba hacia el Registro he visto varios comercios cerrados (con sus propietarios en la puerta esperando a que se fueran los que les habían obligado) y muchos papeles y cartones por el suelo. También he oído silbatos y he visto policía municipal.

A mediodía, y -modo ironía ON- todavía impactado por el masivo seguimiento de esta huelga (al menos en mi ciudad) -modo ironía OFF- he querido ver las noticias para enterarme del alcance real de la huelga. He oído a los líderes sindicales en una rueda de prensa conjunta decir lo siempre dicen y a representantes del Gobierno diciendo lo que siempre dicen en estas circunstancias. También he oído al presidente de la patronal diciendo lo que se espera que diga.

Una de las expresiones más utilizadas en un día como hoy es, como todos sabéis, "piquetes informativos". No sé vosotros, pero yo, al oírla toda mi vida y conocer -creo- su significado, no he sentido nunca -hasta hoy- la curiosidad de conocer su origen y su exacto significado. Como Wikipedia no estaba por la labor (la definición que he encontrado parecía argentina), he acudido a la fuente de las fuentes, al diccionario de la Real Academia de la Lengua Española (RAE para simplificar) y ... ¡sorpresa!, no existe "piquete informativo". Lejos de desanimarme, he decidido desmenuzar la expresión y he optado por buscar "piquete", con el siguiente resultado:

piquete.
(De pico1).
1. m. Golpe o herida de poca importancia hecha con un instrumento agudo o punzante.
2. m. Agujero pequeño que se hace en las ropas u otras cosas.
3. m. Jalón pequeño.
4. m. Grupo poco numeroso de soldados que se emplea en diferentes servicios extraordinarios.
5. m. Pequeño grupo de personas que exhibe pancartas con lemas, consignas políticas, peticiones, etc.
6. m. Grupo de personas que pacífica o violentamente, intenta imponer o mantener una consigna de huelga.
7. m. Col. Merienda campestre.
8. m. Cuba. Banda u orquesta formada por pocos músicos.
9. m. Ec. punzada (‖ dolor agudo).
10. m. Nic. habón.


Como en los concursos, "hemos venido a jugar" y me he decantado por la 6ª acepción (después de una gran duda entre ésa y la 8ª).

A pesar de tener esto casi resuelto, he optado por buscar la segunda parte de la expresión. He escrito la palabra "informativo" y me he encontrado con esto:

informativo, va.
1. adj. Que informa (‖ da noticia de algo).
2. adj. Fil. Que informa (‖ da forma a algo).
 V.


Por tanto, si unimos una y otra definición, podemos concluir que un "piquete informativo" es un "Grupo de personas que pacífica o violentamente, intenta imponer o mantener una consigna de huelga informando". Entonces, ¿por qué nos extrañamos o nos escandalizamos si vemos cómo estos señores organizan la que organizan cada vez que hay una huelga?, ¿por qué nos empeñamos en defenderlos diciendo que son pacíficos?

Las fotos que encabezan la entrada no es el resultado de unos piquetes informativos que han pasado por casa, sino cómo acabó el mueble que nadie quiso.

Ah, hoy hago huelga de BSO. Supongo que no querréis que os informe al respecto, ¿no?

miércoles, 28 de marzo de 2012

Nadie quiere un mueble usado

Como consecuencia de la llegada a casa de esa mesa de comedor y su bufet a juego, debemos deshacernos de alguno de los muebles que hasta ahora teníamos. Con la mesa castellana ha bastado una llamada al Ayuntamiento para que nos dijeran a qué hora debíamos bajarla a la calle para que pasara una brigada a recogerla. Y así lo hemos hecho.

Con el anterior bufet no pasa lo mismo. Es también de estilo castellano, mide 2,45 metros de largo y no sé si es de una sola pieza, pero lo que está claro es que no se puede desmontar. Como nadie parecía quererlo, llamamos a una asociación de ayuda a toxicómanos que, entre otras cosas, recogen muebles para después venderlos en una especie de Rastro o similar. Llegaron tres tipos a casa y al verlo preguntaron si era desmontable. Cuando les dijimos que no, su respuesta fue "Uf, es muy grande, nos podemos hacer daño y tiene difícil salida. No nos interesa". Podéis imaginaros fácilmente la cara que se nos quedó. La única duda que me ha quedado es si ese "tiene difícil salida" se refería a sacarlo de casa o en una posible y futura venta.

Llamé yo a una segunda entidad no lucrativa con los mismos fines que la anterior. Quedamos que pasarían este mediodía sobre las 13,15 h. Todavía estoy esperando que pasen.

A. ha llamado esta tarde a otras dos y la respuesta ha sido en el mismo sentido. Una de ellas ha preguntado si tenía carcoma. Al decirle que "sí, había tenido, pero no se ve", su respuesta ha sido un "No, no nos interesa".

Como no entiendo nada, me he llegado a preguntar si estamos haciendo algo mal o si es mucho pedir que quien quiera el mueble re-ga-la-do por lo menos se ocupe de su traslado. No, si aún habrá gente que querrá que se lo regalemos y que se lo llevemos a dónde él nos diga.

Os dejo una foto del mueble para que veáis que tampoco se trata de un trasto:



Bueno, ya os podéis imaginar el plan de esta noche: Entre todos lo destrozaremos para poder sacarlo de casa (si entró tiene que poder salir, pero como a nadie le interesa, no pienso partirme la espalda cuidando que salga entero) y que se lo lleven las brigadas de recogida de muebles y trastos del Ayuntamiento.

Cambiando de tema. Como la entrada de ayer dio para mucho, no por la calidad de la misma, sino por lo interesante del tema y aunque ya lo adelanté en una de las respuesta a alguno de vuestros comentarios, lo mejor será que os enlace un blog especializado en estos y otros temas de mi buen amigo Jesús (pensaba poner solo las iniciales, pero era tontería porque al clicar veríais su nombre completo), profesor y experto en nuevas tecnologías.

martes, 27 de marzo de 2012

Cumpliendo encargos

Ayer llegué a casa después del trabajo y me encontré con un salón irreconocible. A. quedó con su amiga R., que es decoradora, y le "sugirió" unas cuantas ideas que hicieron que me sintiera como en casa ajena. Sé que es complicado (con un cheque en blanco todos somos diseñadores, en cambio, decorar una estancia con lo que hay ...), pero hay cosas que son de sentido común como por ejemplo no poner el mueble del equipo de música como elemento divisor entre el comedor y el salón a no ser que eso de que un cable recorra media sala a la vista de todos sea de lo más de moda. Bueno, no sigo, sólo quería que supierais el estado en el que se encuentra nuestra casa desde que llegaron esa mesa y el bufet.

Me recordaba el otro día Sara M. (hasta que no se abra un blog no podré enlazarla) que le debo una entrada. Me lo debió pedir con tanta educación que ni siquiera era consciente de ello, así que, ni corta ni perezosa, me lo recordó en un comentario que no venía a cuento. El tema no es otro que (sic) "tus hijos adolescentes, sus "posesiones" tecnológicas, y sobre todo, tu opinión al respecto" Buf, vaya tema. A ver por dónde empiezo.

Si me guío por el cuadro con las edades de mis hijos que figura en el margen superior izquierdo de este blog, convendremos en que adolescentes son Ma y P., aunque dejaremos entrar a Mi. por estar acabando ya la llamada preadolescencia.

Posesiones tecnológicas de Ma:

- Un netbook, regalo de su padrino (Primogénito)
- Una Blackberry, regalo de J. (mujer de D., el irlandés)

Posesiones tecnológicas de P:

- Un móvil (ni idea qué modelo es, pero os aseguro que es muy chulo y que fue un regalo de E., mi querida cuñada argentina, mujer de Primogénito)
- Una Play Station Portable (PSP), aunque en realidad es mía (me la regalaron por mi 40 cumpleaños), pero se la dejo.

Posesiones tecnológicas de Mi:

-

En casa hay un ordenador en el salón, a la vista de todo el mundo, que es la principal herramienta de Mi. cuando consigue hacerse con él.

Como sabéis, los Reyes Magos nos trajeron una conexión WiFi (estoy recopilando documentación para darme de baja y hacer una queja contra Orange) por el deficiente nulo servicio que nos prestan.

Como todos estos dispositivos tienen acceso a internet y si por ellos fuera se pasarían el día navegando (por la red, absteneos chistosos), nos hemos visto obligados a limitar su uso. De esta forma, cuando llegan a casa, deben entregar estos dispositivos a A., quien se los devolverá por la noche, cumplidos sus deberes (en sentido amplio) escolares. En alguna ocasión hemos tenido que confiscarlos durante una temporada porque no se hacía vida en familia. Curiosamente, después de cenar, los dos mayores acostumbraban a irse "a dormir", renunciando a planes como puede ser ver una película todos juntos. Al poco descubrimos que se encerraban en su cuarto y se dedicaban a twittear, entrar en el facebook o chatear. Sin ir más lejos, tanto Ma. como P. se abrieron una cuenta en facebook y Twitter sin permiso, a pesar de ser menores de edad.

¿Mi opinión al respecto? La respuesta políticamente correcta sería aquella que, más o menos, dice que internet es algo bueno, pero dándole un mal uso, puede convertirse en algo malo. La respuesta políticamente incorrecta sería que internet es algo bueno, pero dándole un mal uso, puede convertirse en algo malo.

Así que paciencia, mucha paciencia para que sea algo bueno.

No tenía previsto seguir con el rincón de las BSO, pero he pensado que acabaré mis temas previstos (no buscaré más) y aquí paz y después gloria. Así que allá va otro clásico: "Los 7 magníficos", tema compuesto por Elmer Bernstein.




lunes, 26 de marzo de 2012

Cuando pasé de patán senior

Os debía una entrada sobre el resultado de mi último campamento, entrada que no responderá en absoluto a las expectativas creadas. Y no lo hará porque estas expectativas eran muy elevadas y, sobre todo, porque su desenlace no dependía de mí en buena medida. Vamos, que todos/as estáis esperando que os cuente qué pasó con el patán-senior en nuestro reencuentro tras el affaire entre Q. y patán jr.

Llegué yo al campamento el viernes por la mañana y me encontré a Q. haciendo deporte con unas zapatillas de deporte del pie derecho. No sé si se entiende, quiero decir que ambas eran del pie derecho. Evidentemente se trataba de un error del propio Q. al hacerse la maleta.

El jueves estaba previsto hacer una excursión y aunque diluvió, no se modificó el plan (ya sabéis, es aquello de "aquí dice excursión, pues hacemos excursión") y llegaron todos -niños y los padres que ya estaban allí- empapados y llenos de barro. A partir de ahí Q. se pasó el campamento con botas de agua. Sí, yo también me pregunto por qué no usó las botas el día de la excursión y el otro calzado para el resto de los días. La respuesta es sencilla: la excursión se hizo saliendo del colegio, sin pasar por el lugar reservado para hacer el campamento, por lo que las botas de agua estaban en la maleta, que a su vez estaba en el maletero del autocar.

Ah, lo de las zapatillas de deporte le marcó tanto que no quiso ponérselas más a no ser que fuera del todo imprescindible, como para hacer deporte. 

Decía que yo llegué el viernes por la mañana, topándome con este paisaje cuando me encontraba a pocos kilómetros de mi destino:


Las precipitaciones de los días anteriores habían sido en forma de nieve cerca de esa zona.

Después de localizar las instalaciones (me contaron que no fui el único que se perdió, sino que lo hicieron todos los padres, lo que da una idea de lo inhóspito y apartado del lugar), dejé mi maleta en la habitación que me asignaron (compartida con otros 3 padres) y comprobé que patán senior no había llegado. Si no recuerdo mal no lo hizo hasta poco antes de comer y recuerdo el momento porque nos encontrábamos un grupo de padres charlando cuando él apareció. Saludó a todos ... ¡menos a mí! Sin embargo, después de comer, estando yo con otro padre, me saludó como si hasta entonces no me hubiera visto con un "Què tal, senyor?", que no creo que precise traducción, contestándole con un lacónico "Bé, gràcies". Después le vi charlando con el profesor de nuestra clase durante largo tiempo.

Como en anteriores ocasiones, me pidieron que me ocupara de cobrar a los padres el campamento (el importe correspondiente a los niños ya se ha pagado con anterioridad en el colegio), facilitándome para ello un listado con los nombres de los padres de mi clase y el importe que debía pagar cada uno en atención a los días de estancia que días antes habían confirmado en el colegio. Normalmente la mayoría de los padres viene a pagarme, pero siempre hay algún remolón al que hay que perseguir. El viernes por la noche estaba a punto de acabar mi encargo cuando me encontré a patán senior junto con otros dos padres que, casualmente, ninguno de los tres había pagado aún. Aproveché el momento para acercarme y decirles que estaba a punto de cerrar el tema, pero me faltaban ellos. Los otros dos me pagaron, pero él no, él me preguntó cuánto era y se "sorprendió" del importe, así como discrepar del que le había dicho a otro de los que con él estaba. Estuve a punto de saltar, pero como había otros padres, me limité a decirle que si tenía alguna queja o reclamación lo hiciera en el colegio o que si no me quería pagar, que hiciera lo que quisiera. Al día siguiente me pagó.

Como veis, no ha pasado nada destacable. Bueno sí, el último día, en la entrega de premios (todos los niños reciben el mismo regalo) suele premiarse a un padre de cada clase que haya destacado por su dedicación. Se anunció el nombre del padre del A, el del B, el del C y cuando llegó la nuestra, el D, el profesor encargado de curso dijo "El premio es para ... patán senior" Se me nos quedó cara de tonto a unos cuantos, pues no solo no llegó al principio del campamento, sino que ni siquiera destacó por su colaboración. Yo lo entendí como un intento absurdo del profesor de ganárselo. Sin comentarios.

En atención a Sara M., la foto que encabeza la entrada es de los niños de la clase de Q. Él es el más guapo y el que sale a la derecha de pie y es un poco (solo un poco) más alto que los demás, es el profesor.

Me olvidaba, a patán junior casi ni le he visto.


domingo, 25 de marzo de 2012

Cargando muebles

Ayer, poco antes de las 18 horas, llegamos Q. y yo a casa procedentes del campamento que os anuncié (mañana ya os contaré cómo fue). A. ya me había avisado que teníamos que ir a una población cercana a recoger una mesa de comedor y un bufet que una compañera de trabajo le regalaba porque había comprado unos muebles nuevos. Nos venía muy bien porque teníamos previsto cambiarla (ya habíamos ido a ver algunas) porque la carcoma había decidido que nuestra mesa sería su alimento.

Avisé a mi amigo J., aquel que cuando se aburre corre 100 Km, para que viniera con una de las furgonetas de su trabajo y me ayudara en el traslado. Al poco de llegar, apareció él con su hijo mayor (uno de mis ahijados) que también venía a ayudarnos, junto con nuestro hijo P.

Después de una carretera llena de curvas y tras dos llamadas telefónicas, localizamos la casa de esta compañera de trabajo de A. La mesa parecía más grande que en las fotos que le había enviado a A. Quisimos levantarla y ... ¡Dios mío, aquello pesaba un quintal! La sacamos fuera y nos dispusimos a trasladar el bufet. Aquello ya era del todo imposible por el tamaño del mueble. Lo desmontamos y lo cargamos en la furgoneta. Lo mismo hicimos con la mesa tras mucho esfuerzo y atar la puerta lateral de la furgoneta a la sujeción del cinturón de seguridad porque con la mesa dentro no conseguíamos cerrarla.

Volvimos por la carretera de curvas y llegamos a casa con los muebles enteros. Descargamos parte del mobiliario y A. se fue a casa de sus padres a recoger a JP y S. que se habían quedado a dormir allí porque Ma. invitó a 11 amigas suyas a casa a ver una película y a dormir en sacos de dormir en el comedor. Este plan lo montó Ma. con el consentimiento de A. aprovechando que yo estaba de campamento, porque, la verdad, no me habría hecho mucha gracia levantarme en mi propia casa y encontrarme a no sé cuántas adolescentes merodeando por allí.

Después A. se fue a una cena en casa de uno de sus hermanos a la que debíamos asistir los dos, pero que con el panorama que teníamos con esos muebles de comedor, hizo que yo no pudiera acompañarla. Me quedé con J., su hijo A. y P. desmontando la mesa, subiendo a casa, volviéndola a montar y lo mismo con el bufet.

Acabamos a eso de la 1 de la madrugada tomándonos un gin-tonic, momento en el que llegó A. y se encontró con la sorpresa de que habíamos montado los muebles. En un intento de que la alegría de A. fuera plena, se nos ocurrió colgar el espejo que teníamos a mayor altura, de acuerdo con las nuevas medidas del bufet. El resultado no podía ser peor, a partir de ahora solo podremos invitar a cenar a gente de altura, gente como Pau Gasol y si no os lo creéis, aquí podéis comprobarlo:



Ahora toca cambiar las sillas y seguro que A. tiene previsto alguna cosa más.

Nuestro más sincero agradecimiento a J. que estuvo ayudándonos mucho (también su hijo A. y P.) hasta muy tarde y eso que esta noche se adelantaba el reloj una hora y que hoy ... ¡corría la maratón de Barcelona!

jueves, 22 de marzo de 2012

Otro campamento (13)

Mañana me vuelvo a ir de campamentos, esta vez con Q. en el que será su último campamento al que también van los padres. Él se ha ido esta mañana y yo espero llegar mañana muy temprano.

Será mi décimo tercer campamento y ya solo me faltarán 7 para completarlos todos (a no ser que la Providencia tenga a bien enviarme un nuevo hijo varón, en cuyo caso habría que sumar 4 más). No sé si tengo el récord del colegio, pero si no es el caso, debo andar muy cerca, así que me estoy pensando seriamente exigirles mi más que merecido premio. Además, hasta ahora, no he faltado a ninguno.

El ser un veterano en estas situaciones tiene su parte positiva. Los demás padres te miran con cierto respeto y te consultan cosas y los profesores como que te tratan muy bien (ya solían hacerlo, la verdad) y te encargan tareas más agradables.

La parte negativa es que ya no tienes muchas ganas de participar en ese partido de fútbol de padres en los que los treintañeros corren como locos en pos del balón y entran con los tacos por delante si es necesario. Cosas de la edad. Creo que ya lo he contado en más de una ocasión, pero temo el día que acompañe a S. en sus últimos campamentos y vea a los padres de los otros niños mirándome con cara de pena, mientras murmuran aquello de "Pobre niño, como no ha podido venir su padre, le acompaña su abuelo". Sé que lo pensarán o alguno lo dirá. Solo pido no oírlo.

Este año estrenamos instalaciones en una población conocida por su lago y por ser una zona volcánica. Ya le he pedido a uno de los padres que está allí desde esta mañana que haga fotos y me las envíe por Whatsapp. A pesar de haberme contestado afirmativamente, todavía estoy esperando recibirlas. Se habrá olvidado.

Este campamento que empiezo mañana tendrá el aliciente de encontrarme con el padre del increíble Hulk, aquel niño que empujó a Q. contra una pared y que .... ya sabéis todos lo que siguió. Espero que la cosa no vaya a más (de momento, y por mi parte, así ha sido), pero también tengo muy claro que como se le ocurra sacar el tema le diré las cosas bien claras. Eso sí, tendré que estar muy atento -disimuladamente- a su hijo cada vez que se acerque a Q.

Bueno, ya os adelanto que mañana no habrá entrada (no me da la vida para dejar una programada, que hoy ha sido una tarde muy densa) y que espero os acordéis de mí pensando que estaré bregando con unos cuantos niños ajenos y solo uno propio o, quien sabe, dependiendo de las instalaciones deportivas que allí me encuentre, descansando mientras practico deporte.

Uy, que me olvidaba de la BSO de hoy ... no sé si seguir con esta sección porque a tenor de la ingente cantidad de comentarios que provoca, me estoy planteando muy seriamente acabar con ella de un plumazo. Mientras me lo pienso, os dejo la de hoy, que no es otra que el tema  compuesto por Anton Karas para la película "El tercer hombre".


miércoles, 21 de marzo de 2012

¿Leyenda urbana?

Cuando vivía en casa de mis padres existía un sonido muy peculiar que se repetía cada equis tiempo. Era un sonido similar al que hacen unas canicas cuando, al caerse de una bolsa, golpean el suelo. Mis hermanos y yo estábamos convencidos de que era el vecino de arriba (un gran tipo, pero que en el reparto de coordinación llegó tarde, muy tarde, vamos debió ser el último) al que constantemente se le caían las dichosas bolitas de cristal.

Pero no se caían todas a la vez, se le caía una, o quizá dos o tres, pero siempre de una en una, de tal manera que el ruidito era siempre el mismo, ya sabéis: clinc ..................clinc ........clinc ....clinc ..clinc..clinc, cliiinc, cliiiinc, cliiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiinc y aquí empezaba a rodar.

Fue pasando el tiempo y -cosas de la naturaleza- nos íbamos haciendo mayores. El mundo iba cambiando a nuestro alrededor a un ritmo vertiginoso, al mismo ritmo que cambiábamos nosotros. Pero el ruidito seguía. Esa inmovilidad ante tanto cambio (pensad que nuestro vecino, aun tratándose de un ser descoordinado, también crecía), nos llevó a plantearnos la posibilidad de que aquel sonido (tan familiar a base de repetición) quizá tuviera otro origen. Como los orígenes eran diversos y todos ellos gozaban de gran credibilidad, no nos atrevimos a zanjar el tema con una única conclusión. Podríamos decir que el ruidito de las canicas alcanzó el grado de "leyenda urbana", reducido al ámbito familiar, pero leyenda al fin y al cabo.

El tiempo siguió pasando y llegó el momento de abandonar el nido familiar e iniciar junto a A. nuestro común proyecto de vida y amor ... perdón, ¿que alguien se ha perdido? ... estaba diciendo que llegó el momento en que me casé y me fui de casa. Y lo mismo hizo el vecino de arriba y ... ¡el sonido desapareció!, como si se lo hubiera llevado el vecino consigo. ¡Pues claro que se lo llevó!, fue irse él y desaparecer el ruidito. Como decía, me casé y pasé a vivir en mi nueva casa. Vamos por la tercera casa desde entonces y os puedo asegurar que aquel ruidito no lo he vuelto a oír a no ser que a alguno de nuestros hijos se le caiga una canica (clinc ..................clinc ........clinc ....clinc ..clinc..clinc, cliiinc, cliiiinc, cliiiiiiiiiiiiiiiiinc) por lo que casi 20 años después tenemos las siguientes premisas:

- El clinc ..................clinc ........clinc ....clinc ..clinc..clinc, cliiinc, cliiiinc, cliiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiinc solo se oía en casa de mis padres.

- Coincidió en el tiempo en el que aquel vecino vivió en el piso de arriba.

- No he vuelto a oír ese ruidito nunca más

Por tanto, puedo concluir que no se trataba de una leyenda urbana, sino que era nuestro vecino de arriba.

Gracias A. por hacer que nos acordáramos de ti tan a menudo.


Volvemos a los dibujos animados y a Disney-Pixar en la BSO de hoy. Concretamente lo hacemos con uno de los temas de la película "Monsters SA". Aquí tenéis:





martes, 20 de marzo de 2012

Día del padre

Ayer fue el día del padre y me negué a escribir una entrada sobre eso por considerarlo como una imposición más de las marcas comerciales para que gastemos más comprando un regalo al padre (y eso que ahora me toca recibirlos).

Ya a primera hora de la mañana, recibí a través de Facebook la felicitación de una madre de dos criaturas. Llegué al despacho y felicité a su titular por ser ayer su onomástica. Enseguida, después de agradecérmelo, me felicitó él a mí. A pesar de imaginarme por dónde iba, le dije que ayer no era San Paterfamilias. Sonriéndome me contestó "No, felicidades porque hoy es el día del padre y tú ...", como queriendo decir que lo celebro más que otros por tener tantos hijos (no sabía yo que si tenías más hijos lo celebrabas más). Sin embargo, yo aguantaba estoicamente la situación sin ceder ni un ápice a esta "imposición".

Por la tarde, al llegar a casa después de trabajar, JP y S. se abalanzaron sobre mí en cuanto me oyeron llegar y me felicitaron. S. me cogió de la mano y me llevó a la cocina, donde había un regalo para mí en lo alto de la alacena. Me pidió que lo cogiera y lo abriera porque "Te va gustar mucho", repetía. Estaba envuelto en papel de seda y al abrirlo me encontré con esto:


Cualquiera puede pensar que es una tontería y, sobre todo, que al no ser el primer regalo que recibo de un hijo el Día del padre, no me haría ilusión alguna. Al contrario, me encantó. Había que ver la cara de S. mientras yo abría -con toda la parsimonia del mundo- este regalo.

Lo que claramente puede apreciarse es la fuerza de ese dibujo (no es un cardo, soy yo, aunque ese doble tupé -inexistente en la realidad- más parecido a unos cuernos, indiquen lo contrario), cómo el artista intenta transmitirnos la arrebatadora personalidad del modelo y la fina estampa que le caracteriza. Me encanta que haya sabido apreciarlo y, sobre todo, transmitirlo. Un don al alcance de unos pocos elegidos. ¡¿Y qué decir de su escritura?! Esa seguridad en sus trazos y esa picardía al querer establecer un juego con el lector, ocultándole  parcialmente la primera de las letras para comprobar si es capaz de adivinar qué quiso decirnos. Sin duda alguna, un genio este S.

También estaba impaciente JP, cosa que entendí al instante, pues al acabar de abrir el regalo de S. me espetó con un "Ahora me toca a mí. Ven", y me llevó de la mano a mi habitación para que levantara mi almohada. Al hacerlo, me encontré con esto:


Por si quedaba alguna duda me dijo "¡Es una chocolatina!" Estaba todavía emocionado pensando en que JP había decidido sacrificarse en pos de su padre, cuando oigo a S. explicándole a Q. "Un niño no se ha comido su chocolatina y JP se la ha agafado para dársela a papá". Sin que sirva de precedente, existen situaciones en las que el fin justifica los medios. Gracias JP.

A pesar de todo ello, seguía dándole vueltas a si debía dedicar una entrada al día del padre. Llegó la noche y me acosté sin pensar mucho más en el tema. Esta mañana, sin embargo, me he encontrado en internet la preciosa fotografía que ilustra esta entrada y que, en mi modesta opinión, ha sabido captar esa conexión existente entre un padre y un hijo, lo que, unido a la lectura de esta entrada ha conseguido que me replanteara escribir esa entrada.

Ya esta. Decidido. La escribiré (pero será en otra ocasión porque con tanto prolegómeno, ya tengo entrada para hoy).

Hoy, como otras veces, no habrá BSO porque ... porque ... porque no me da la gana.

Nota del autor: Mi más sincero agradecimiento al colegio de los niños que, saltándose una norma no escrita, pero tradición de muchos siglos, ha optado por no regalar a los padres esa huella de mano en barro. De verdad, muchas gracias.

lunes, 19 de marzo de 2012

Cuando fui testigo

El jueves pasado asistí por primera vez a un juicio ... por primera vez en calidad de testigo.

Un compañero (los abogados acostumbramos a llamarnos así entre nosotros) tuvo la "feliz" idea de proponerme como tal en un juicio después de que yo hubiera intervenido en una negociación y redacción de unos contratos. Os cuento:

Un cliente del despacho tenía un bar y decidió traspasarlo. Encontró a una persona interesada en ello y vinieron  para que les redactara el contrato. El que se quedaba con el bar pasó a ser también cliente del despacho. Días después de que ambas partes lo hubieran firmado, me telefoneó el que se quedaba el bar-cafetería diciendo que le habían engañado. Al parecer existía un problema con la salida de humos que conllevaba quejas de los vecinos, llegando incluso a intervenir el Ayuntamiento. Contacté con el que traspasaba el bar y les convencí para que alcanzaran un acuerdo. Modificamos el contrato inicialmente firmado, se firmó el nuevo contrato y, delante de ellos, rompí los ejemplares del anterior contrato. Aun así, siguieron los problemas.

Ante la imposibilidad de alcanzar un acuerdo, el nuevo cliente decidió reclamar judicialmente pidiéndome que le representara. Le expliqué que no podía hacerlo por cuanto había sido abogado de ambas partes y no era ético que ahora defendiera a uno de ellos. Contrató a otro abogado e interpuso una demanda contra el anterior, quien, al recibirla, vino a verme para ver cómo preparábamos la defensa. Al igual que al anterior, le expliqué que no podía ser su abogado y, aunque no lo entendió (o no lo quiso entender), le recomendé a un compañero.

Hace unas semanas, me llamó éste último abogado preguntándome si me parecía bien que me propusiera como testigo en este procedimiento. Le dije que no, que entre otras cosas, el contrario, seguía siendo cliente del despacho (a diferencia del otro que, una vez traspasado el negocio, se dio de baja como cliente). Como el titular de la asesoría en la que colaboro estaba de viaje, le pedí que esperara a que volviera para comentárselo. Sería entonces cuando le daría una respuesta definitiva. Pasados unos días le llamé, le dije que no, que no me parecía buena idea y que debía entenderlo. Es entonces cuando me dijo que ya me había propuesto y que incluso lo había hecho judicialmente (es decir, que fuera el Juzgado quien me citara, lo que hace más complicado negarse a acudir). Además él me decía que no debía preocuparme, que solo debía decir que había roto un contrato anterior. Con cierta ironía le agradecí el "consejo" y le manifesté mi malestar con su actuación.

Como me pareció una muy mala jugada por parte de este abogado y, principalmente, entendía que éticamente no podía decantarme por una de las partes, habiendo sido abogado de ambos, pensaba cómo podía yo darle la vuelta a todo.

Llegó el día del juicio y me dirigí a la Sala de vistas. Allí estaba el abogado que me había propuesto como testigo y, en presencia de su cliente, me saludó dándome la mano y recordándome qué es lo que debía decir. Le miré a la cara y le dije "No declararé nada". Se quedó callado e insistió en explicarme lo que debía decir. "No insistas, no declararé" y me quedé en un aparte. La auxiliar judicial me pidió un carnet y le entregué el de abogado, no el DNI.

Entraron las partes y se dio inicio al juicio. Al cabo de un rato, llamaron a uno de los testigos propuestos. Al rato, a otro y después a un tercero. Finalmente oí mi nombre y entré en la Sala. El Juez me informó de aquello de "sabe el testigo que tiene la obligación de decir verdad ...", para más adelante añadir "quizás, en su calidad de abogado tiene previsto alegar el deber de secreto profesional" "Así es, Señoría", contesté. Le dije que todo el conocimiento que tenía de los hechos era como consecuencia de mi actividad profesional. Aun así el Juez permitió que se me hicieran preguntas y yo, lógicamente, no las contesté alegando ese deber.

Ya sé que esta entrada no es interesante ni graciosa, pero por lo novedoso (al menos para mí), me ha parecido oportuno explicarlo. Además me pareció muy raro estar en un lugar físico muy distinto al que habitualmente ocupo: ante el Tribunal, de pie y con un micrófono pegado a la boca.

La BSO de hoy, como casi siempre, nada tiene que ver con la entrada. Se trata de la música de la película "Rocky", ya sabéis, aquella que protagonizó Sylvester Stallone y que significó su primer (y creo que único) éxito en la gran pantalla.




sábado, 17 de marzo de 2012

Motores de búsqueda

Os debía una entrada sobre los "motores de búsqueda" que, como sabéis, es un tema muy recurrente para cuando no sabes sobre qué escribir, aunque a veces también sirve para desengrasar.

Quiero aclarar, antes de seguir, que ésta es una entrada programada, aunque no creo que haya existido una modificación de tal calibre que haga que este post esté lleno de errores. Asimismo, quiero aclarar que las transcripciones que se hacen de estas frases son literales, es decir, tal y como el/la incauto/a navegante lo escribió, de forma que no me hago responsable de los posibles errores ortográficos y/o gramaticales.

Entrando en materia y repasando las palabras o frases empleadas para llegar (consciente o inconscientemente) a este blog, nos encontramos con alguna sorpresa. Vamos allá:

- "Colocar zapatero pasillo": Imagino que tiene que ver con aquella foto que acompañé a una entrada en la que explicaba los diferentes muebles zapateros que hay en casa. Claro que  también pudiera ser que nuestro protagonista buscara a alguien que hubiera colocado allí al ex-Presidente del Gobierno, a aquel que actualmente supervisa nubes (lo que podría explicar la prolongada sequía que sufrimos).

- "3.000.000 viviendas elegidas": Ni idea de qué es lo que buscaba este individuo y menos aún de cómo es posible que haya llegado hasta aquí con semejante frase.

- "madreymas": Sin duda una de las sorpresas agradables de la búsqueda. Aunque, pensándolo mejor, ¿cómo es posible que alguien llegue a este blog tecleando el nick de la autora de un blog propio? O sea, que si yo tecleo "paterfamilias" es posible que el buscador me lleve a MadreYMas, ¿no? Hablaré con el Sr. Blogger para ver qué ha podido pasar. 

- "frases tontas": Hombreeeee, ya sé que este blog no alcanza cierto nivel, pero alguna inquietud intelectual sí tengo. Tendré que pensar mejor los temas de mis próximas entradas.

- "fecha toma fuenteovejuna por los nacionales": Siento no haber podido contestar a su pregunta, pero me sorprende la extensión de las palabras clave en su búsqueda.

- "mira lo qur ha hecho tu hijo": "Oye, pater ¿estás tonto o qué?", pensará alguno. "¿No ves que es el nombre de tu blog y lo más lógico es que llegue a él tras teclear eso?" Sí, lo sé, lo que me sorprende es ese pequeño detalle consistente en que en lugar de "que" ha escrito "qur" ... y no una vez ... o dos ... ¡sino tres!

- "importancia del buen ejemplo": Definitivamente el Sr. Blogger está fatal. Además de cambiar todas las zonas horarias, ha perdido el norte. ¿Cómo es posible que a alguien que con toda su buena fe busca la "importancia del buen ejemplo" vaya a parar aquí?

- "mesas de cristal ikea para ordenador": Sí, he hablado de Ikea, sí he hablado de una mesa de ordenador, sí he hablado de una mesa de ordenador de Ikea ... ¡pero no es de cristal!

- "publico premios zapping": Ésta ha aparecido hace poco tiempo. Imagino que por la proximidad de la edición de este año y por haber tratado el tema el año pasado. Me queda la duda, no obstante, de si quería escribir "público" o "publico".

En un rápido repaso del origen de las visitas a este blog, no se aprecian grandes variaciones, pero destacan visitas desde Perú (gracias, gracias, gracias), República Dominicana y Puerto Rico (?), Irlanda (D. ¿has estado allí hace poco y has entrado en el blog?). Ah, ha habido alguna entrada desde Canadá. ¡Te pillé, Justin Bieber, te has leído mi entrada sobre ti, ¿eh?! Se lo diré a Ma., creo que le hará ilusión.

Uy, que toca BSO. A ver, a ver ... ¡Ya está, un clásico!: "Superman", de John Williams.


viernes, 16 de marzo de 2012

17 Edición Premios Zapping

Ayer asistimos, un año más, a la Gala de la entrega de los Premios Zapping, organizada por TAC (Telespectadors Associats de Catalunya) y que cumplía su 17ª edición. El año pasado ya os expliqué cómo funcionaba esto, así que no lo volveré a hacer y me centraré en lo acontecido anoche.

Fuimos acompañados de varios matrimonios amigos y nos sentamos en la sala a esperar que empezara la gala. Imagino que alguno de los premiados que confirmó su asistencia se retrasaba porque aquello no había manera de que arrancara. Por fin lo hizo y se anunció la actuación de deparamo, un tipo con un piano fucsia y unas gafas de pasta amarillo fosforito del que no había oído hablar en mi vida, pero que por la reacción del público, debe ser conocido.

No sé por qué (porque no tengo ni edad, ni medios, ni idea alguna), me dio por grabar -con el móvil, no os hagáis ilusiones- parte de la gala y así la entrada será más amena (o más pesada, no lo sé), viendo alguno de los momentos de la misma.

Empezamos con parte de la actuación del tipo de las gafas de los chinos:


Al acabar dio inicio la entrega de premios y éstos fueron sucediéndose en sus diferentes categorías. No recuerdo el orden, pero alguno de los premios fueron


Salieron a recogerlo Jesús Álvarez y Ana Blanco (al natural es como en la tele, con la misma cara que hace no sé cuántos años), aunque hicieron salir a María Casado, que también presenta el Telediario y el programa 59".

En el apartado de mejor actor (se entiende que de series de televisión, que es de lo que iba la gala) el premio se lo llevó Eduardo Noriega, recogiéndolo una compañera de reparto (ni idea de su nombre) porque él está -o eso nos dijeron- en Sri Lanka, rodando una película. A partir de ahora, cuando me vaya de vacaciones (no creo que pueda ir a destinos tan exóticos) diré que estoy rodando una película.

El premio para la mejor actriz fue para Ángela Molina, que dedicó el premio a su hija de 8 años. Quizá no sea tan mayor como parece, porque si tiene una hija de esa edad ...

Llegó el momento de los anuncios (atenta Sunsi) y los finalistas eran:


En el momento en que se anunció el ganador, creo que se produjo la única decepción de la noche porque el premio se lo llevó "La Caixa". Nadie se lo esperaba. Encima el tipo que salió a recoger el premio en nombre de esta entidad financiera tenía una cara de director de oficina al que le pides un préstamo y te lo niega que no se podía aguantar.

El momento estelar de la noche -en mi modesta opinión-. se produjo cuando Carlos Sobera salió a recoger el premio por "Atrapa un millón", un concurso que no he visto en mi vida, pero que algo tendrá porque fue premiado. Este Sobera es un tipo simpatiquísimo (podéis comprobarlo en el extracto de su discurso):


Lo mejor, sin embargo, fue cuando se retiraba que, sin micrófono en la mano, gritó a todo el público "Ah, me olvidaba, el próximo día 25 de mayo (Final de la Copa del Rey entre el Barça y su Athletic) ya os podéis ir preparando", mientras dirigía un gesto un tanto vulgar como es arquear su cuerpo poniendo el culo en pompa para después, en un rápido movimiento hacia adelante ... bueno ya sabéis. Pues eso, hay que tener cara para dirigirse así a un auditorio plagado (se supone) de culés.

Se premió también a una serie de gran éxito en la televisión pública catalana: "Polseres vermelles" (Pulseras rojas), recogiendo el premio, su director, una actriz y el guionista, quien confirmó que Steven Spielberg le ha comprado los derechos de la serie.

Otro de los galardonados fue Tomàs Molina, "hombre del tiempo" de TV3 (y como os decía el año pasado, amigo de Je.  y medio pariente de su mujer, M., la BTV), que en su discurso de agradecimiento dijo que ahora todo el mundo le pregunta que cuándo lloverá, contestando que  "el martes lloverá, así que cuando lo haga, por favor, acordaos de que yo os lo dije". Muy simpático, pero eso también soy capaz de decirlo yo (y acertar), mientras no diga dónde ...

Otro tipo que me gustó mucho fue un ciudadano extranjero (hablaba igual que nuestro amigo D., el irlandés) que había sido premiado por una iniciativa solidaria en internet y que en su discurso dijo que tiene una hija que nació con una grave enfermedad y que, como todo el mundo, se preguntaba por qué. A raíz de eso, conoció el mundo solidario y, desde entonces, pasó a preguntarse para qué.

Después pasamos a una enorme sala donde dimos buena cuenta del catering. Lo mejor fue cuando A. y M. descubrieron que el piso de arriba también había catering y bar bastante más despejado, así que, aunque no hubiera gente de la farándula, allá que nos fuimos. Siempre es mejor tener el estómago lleno, que no pasar hambre aunque sea viendo a unos cuantos "famosillos".

jueves, 15 de marzo de 2012

¿Veis como caemos mal?

En la edición del diario "El Mundo" de hoy aparece una noticia que me ha llamado la atención. Y no ha sido por la noticia en sí, que era vox populi y que como la gran mayoría de gente sabe, al afectar a los dos grandes, no interesaba hablar del tema, simplemente se intentaba tapar a base de darles más dinero que al resto de equipos (vía derechos televisivos, por ejemplo), sino por una cosa tan simple como poner una determinada fotografía para acompañar a la noticia.

Llamadme tiquismiquis, pero a mí esto me parece un escándalo y una sinvergonzonería. La noticia y la fotografía que la ilustra no tienen nada que ver y ellos, amparados en ese (único) derecho que parece existir como es el de libertad de expresión, dirán que no están diciendo que el Sevilla FC sea un club deudor. Sin embargo, la mayoría de lectores asociarán la palabra "deuda" con "Sevilla FC", ya sea porque solo lean el titular, ya sea porque el subconsciente tiene estas cosas, o por el motivo que sea.

Existiendo otros clubes en una conocida situación "complicada", como pueden ser el Zaragoza (me duele escribirlo Modestino, y me duele porque es tu equipo y porque tenéis un entrenador al que el sevillismo le debe mucho, por lo que hizo con el equipo y por lo que le maltrató la prensa y parte de la afición) o el equipo que tiene el nombre de una calle de Sevilla, ellos prefieren poner una foto de un jugador del Sevilla. ¿No me digáis que la intención no es hacer daño?

El tema del fútbol y su deuda se está complicando mucho. Lo que desconozco es por qué sale ahora la noticia, cuando, como decía, es un asunto de dominio público. Decía que se está complicando porque este anuncio en el Congreso de los Diputados ha hecho que se sucedan rápidamente diferentes reacciones. El Presidente del Bayern de Múnich se ha descolgado con una declaraciones no exentas de razón en las que dice estar harto de esta situación con unas palabras (más o menos) así "No puede ser que les demos dinero (a España) para salir de la mierda y sus clubes de fútbol se endeuden de esta forma".

Es evidente que esto provoca injusticias y tratos desiguales. No la deuda en sí, sino las (nulas) consecuencias de la misma. ¿Qué interés puede tener un club en no endeudarse si sabe que haciéndolo no pasa nada?, ¿para qué voy a abstenerme de fichar a este jugador que tiene una ficha inasumible para la economía de mi club si luego me declaro en concurso de acreedores y ya está?, ¿qué gano yo ajustándome a mi presupuesto sin poder fichar a grandes jugadores? ... En España, que yo sepa, solo se "castigó" al Mallorca sin competir en Europa hace un año por no haber hecho los deberes, pero esta sanción vino de Europa, no de  España, donde el Mallorca y otros siguen participando en las diferentes competiciones.

Ansioso estoy de leer los comentarios del seguidor del Athletic de Bilbao que aprovechará la entrada para arremeter contra el Sevilla, sin darse cuenta de que en los últimos partidos ha gozado de los favores arbitrales (aquí y en la Europa League) aunque esto es ya otra historia. No obstante, le deseo lo mejor para el partido de esta tarde.

Sí, ya sé que existen temas mucho más importantes, que deberíamos concentrar nuestras fuerzas en combatir otras injusticias e incluso que hay quien piensa que aquí no hay ninguna injusticia, pero eso no quita que también debamos prestarle atención a éstos.

Y eso que hoy quería dedicar la entrada a los "motores de búsqueda" como por aclamación se ha demandado (sé que no es así, pero tenía unas ganas de escribir eso de "por aclamación" ...)


Con la BSO de hoy volvemos a los dibujos animados y allá va un tema de la película "Hércules", de Walt Disney: "Canción de Meg".