En este país somos muy aficionados a juzgar a la gente con absoluta ligereza. Lo hacemos en ámbitos más o menos privados, como podría ser en una cena con amigos o en una tertulia de bar, así como a nivel público.
Mentiría si dijera que yo nunca he actuado así, pues también me he dejado llevar por opiniones personales y, sin tener más elementos de juicio, sentenciar acerca de la culpabilidad o no de un personaje público.
Lo que me lleva a escribir esta entrada y denunciar la injusticia que ello supone es el linchamiento que desde hace un tiempo se está haciendo de un personaje público, interviniendo en su maltrato la casi absoluta mayoría de medios de comunicación, ya sea prensa escrita como televisión. Parece existir una carrera desbocada por ser los primeros en dar el último dato que "condene" aún más a esta persona. Y si para ello se ha de recurrir a la mentira, la exageración y la tergiversación, ¡qué más da!. Hemos llegado a un punto en el que todo vale.
Nadie tiene en cuenta que, además de ese personaje, existe una persona, con su dignidad. Y existe también una familia, una esposa y unos hijos, que tienen todo el derecho del mundo a ser respetados.
Todos hemos sido testigos directos de carreras políticas arruinadas por juicios paralelos (¡qué gran responsabilidad tiene la prensa en todo esto!) que, amparándose en un malinterpretado "derecho a la información", han destrozado sin piedad a una persona. A la ya famosa "pena de banquillo" se sumó la "pena de telediario", con esas tremendas imágenes de personas esposadas entrando en un furgón policial y públicamente acusadas de todo tipo de delitos y que, posteriormente, en muchos casos, han sido absueltas de toda acusación y no han recuperado ese puesto que ocupaban. Se ha echado de menos a la prensa en ese momento. Ahí no, no hay noticia carnaza y por tanto no interesa.
¿Y por qué escribo sobre esto?
Pues porque conozco a una persona que lo está pasando muy mal en estos momentos con un affaire de este estilo. Está siendo vilipendiada públicamente. Y también en este caso, además de su dignidad, existe una familia detrás. ¡Es todo tan injusto!
La BSO de hoy es el tema principal de una película relativamente reciente, "Invictus", y que es un ejemplo de superación de obstáculos para lograr un objetivo. A ella va dedicada.
Pues si Pater, demasiado a menudo juzgamos con total libertad las actitudes ajenas... Recuerdo una vez que, cierta persona bastante cercana a mí "separaba" a un matrimonio amigo mío. No me pude resistir, y le solté que a esas personas que hablan de los demás, no les haría gracia oirlo de ellos mismos, pero ni se dió por aludida.
ResponderEliminarPor otra parte, ahora mismo estoy "muerta de miedo". Dicen que cuando tienes hijos, a callar, porque no sabes por dónde te van a salir. Pues yo ahora mismo estoy criticando la actitud de muchos padres de mi alrededor, porque permiten a sus hijos hacer cosas que a mí no se me pasarían por la cabeza. Y cada vez que lo comento con alguien, pienso, ¿cómo me vendrá a mí la moneda devuelta? Ya os contaré en su momento.
Sara M.
Uy, sí, hay que tener cuidado con los hijos. Nos hacen hacer cada papelón ...
EliminarValiente post, amigo. Comparto lo que dices del todo. Hay gente que habla y escribe sin contrastar nada y hay ciudadanos que opinan con las tripas.
ResponderEliminarMe alegro estar de acuerdo contigo
Eliminar...yo llevo pensando hace un tiempo aquello de "secreto de sumario" y que si existe alguna filtración; tengo muy claro que tendrían que actuar contra el máximo responsable del Juzgado ¿no se pueda actuar en este sentido? ¿No tiene el Juez que lleva según que asuntos tener cuidado y responsabilidad sobre esas filtraciones?
ResponderEliminarPienso exactamente igual. Me parece un escándalo el tema de las filtraciones. Además de que algún funcionario se estará lucrando, es una actitud imperdonable.
EliminarPater, no me digas que erea amigo de Remedios Cervantes???, o lo que es "peor", del mismísimo Urdangarín!!!!!!???? jajajajajajaja
ResponderEliminarYo, creo que todos caemos en la tentación de prejuzgar a la ligera (o al menos dar nuestra opinión al respecto, a veces, sin llegar a juzgar). Está claro que siempre hay que contrastar la información, ver las dos partes y caras de la misma moneda e intentar ponerse del otro lado para poder hacer un juicio de valor más "justo". Yo prefiero, como dice la canción, "ser consejo, nena pero no tu juez".
Igual de una forma interna (para mis adentros) sí que llego a juzgar, pero prefiero no decir nada, porque, ala hora de la verdad, no quiero ser injusta con nadie.
Bicos...
No estoy autorizado para decir nada más (queda muy misterioso y repelente, pero es así)
EliminarEs difícil formar una opinión sin llegar a juzgar a la persona. Para eso hay que ser un profesional de la ley, como tú. De todas maneras, yo creo que el deber de los medios de comunicación es dar todos los puntos de vista. Un beso.
ResponderEliminarEso es y ese deber de los medios de comunicación casi nunca lo cumplen.
EliminarDiana, Pater... La prensa a galope por publicar primicias que no son debidamente contrastadas. No se cae en la cuenta que "difama que algo queda". Después es muy complicado lavar la imagen. Me ha encantado tu post. Hay que rescatar la presunción de inocencia.
ResponderEliminarUn saludo.
Gracias Pater, soy la persona que conoces y lo está pasando mal. No me había leído esto hasta hoy y la verdad, es que me ha animado mucho, tanto tu Post como los comentarios; no todo está perdido pues. Un abrazo fuerte!!!!
ResponderEliminarCuentas -ya lo sabes- con todo nuestro apoyo y colaboración. Un abrazo
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