Ahora que ha pasado Carnaval voy a dedicar esta entrada a hablar de una figura que tiende a desaparecer (gracias a Dios) y que aprovechando esta época de excesos y despropósitos suele dejarse ver. El personaje en cuestión es el arlequín.
¿Qué es un arlequín? Todos tenemos una vaga idea de tan siniestro personaje a través de cuadros supuestamente infantiles (como los de aquellos payasos tristes) o de artistas que no destacan precisamente por reflejar la alegría en sus obras (por lo menos en sus pinturas donde aparece el arlequín), como pueden ser Juan Gris (si es que hasta el apellido ya denota cierta tendencia a la tristeza) o Picasso. Pero no me quiero desviar, volvamos a la pregunta. ¿Qué es un arlequín?, ¿Hay entre mis lectores algún arlequín?. Más fácil, ¿alguien tiene algún familiar, amigo, conocido o incluso vecino arlequín?. No nos compliquemos, exceptuando el carnaval, ¿alguien ha visto alguna vez un arlequín?. Espero ansioso una respuesta.
Veamos qué dice al respecto Wikipedia:
Arlequín (Arlecchino en italiano) es uno de los personajes clásicos de la Commedia dell’Arte ('comedia del arte’), un tipo de teatro improvisatorio aparecido en Italia en el siglo XVI. Su traje estaba hecho de rombosmulticolores —los cuales en un principio eran remiendos que representaban la pobreza, ya que Arlequín no es más que un Zanni astuto— pero con el tiempo fue estilizándose hasta convertirse en un traje atractivo y elegante.
Fue empleado en muchas piezas de Comedia dell’Arte, apareciendo como un personaje masculino indispensable dentro de ellas. Su función es la de un valet cómico, siendo conocido por su sentido del humor. Contrariamente a Brighella, hace piruetas y acrobacias.
Arlequín desempeña el rol de servidor humilde, como en El servidor de dos amos (de Carlo Goldoni) suelen verse como comodines en los naipes. Puede ser el enamorado de Colombina, y por consiguiente un rival para Pierrot. En Francia aparece en la época de Molière, cambiando sus características, quedando incluso como un sirviente ingenuo y sensible, como en la Isla de los esclavos.
Si desmenuzamos la definición que nos da Wikipedia sobre este individuo, nos encontramos con los siguientes rasgos destacables:
- "uno de los personajes clásicos de la Comedia del Arte, un tipo de teatro improvisatorio (pues ya lleva años para ser improvisatorio, ¿no?) aparecido en Italia en el siglo XVI" (16 para el que no sepa leer números romanos). ¿Y quién le manda salir de ese teatro? ¿y de ese siglo? Podría haberse quedado allí ya hacernos la vida un poco más fácil a los demás. Por cierto, ¿la palabra "improvisatorio" existe?
- "su traje estaba hecho de rombos multicolores". Este debe ser el único rasgo por todos conocido y de ahí que la gente, sin pensárselo mucho, diga "¡Ea!, me voy a disfrazar de arlequín", o peor aún, "Voy a disfrazar a mi hijo de arlequín" Y el pobre niño, sin comerlo ni beberlo, a hacer el ridículo rodeado de sus amigos disfrazados de súper héroes. Aprovecho para hacer un llamamiento a las madres del mundo: si queréis que vuestros hijos vayan por el buen camino, por favor, nunca (nunca es nunca) los disfracéis de arlequín.
- "(...) hasta convertirse en un traje atractivo y elegante". ¡Alto ahí!, ¿quién es capaz de escribir semejante memez?. ¿Atractivo y elegante? No he visto nunca en una boda, una recepción, una puesta de largo o cualquier otro acontecimiento a nadie tan "elegantemente" vestido.
- "siendo conocido por su sentido del humor" ¡¿Cómo?! ¿Alguien ha visto alguna vez un cuadro que represente a un arlequín sonriente? ¿Qué sentido del humor es ése? ¡Por Dios!
- "puede ser el enamorado de Colombine" Llamadme ignorante, pero ¿quién es ésta? Lo que esta claro es que muy normal no puede ser enamorándose de semejante personaje.
La BSO de hoy seguramente se compuso después de ver a un arlequín. Se trata de "Misirlou" de la película Pulp Fiction.
Hey, había escrito un comentario y no me lo publica!!!!
ResponderEliminarMarrrrrrrdito blogger!
No te sulfures ;-)
EliminarMuy buena entrada, me he reído mucho.
ResponderEliminarNo me gusta el disfraz de arlequín. Me da perezaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa.
Bueno, me dan pereza los carnavales en general... creo que desde los 16 me provocan apatía y malhumor a partes iguales!
Bueno, ya somos dos.
EliminarNunca me ha gustado disfrzarme, y por no gustarme, no me "gustan" ni los payasos. La definición he tenido el valor de leérmela entera, así que no me hagas comentártela.
ResponderEliminar¿Pulp Fiction, Pater? No te pega nada, tan sangrienta, violenta... Tarantino, en una palabra.
Bueno, si te la has leído, algo habrás aprendido (como yo).
EliminarRecuerda que lo que pongo son BSO que, aunque me parezca buena, no tiene por qué coincidir con una buena película. En este caso, además, ni la he visto ;-)
Yo nunca he visto un disfraz de Arlequín. No sé si estarán ahora más de moda. Un beso.
ResponderEliminarSusana, no te has perdido nada y puedes considerarte una afortunada.
EliminarMe he reído, Pater... Lo más parecido al ropaje del arlequín son esos jerséis de rombos , que también los hay de coloricos...A mí, como Sara M. ... no me gusta difrazarme. Esosí, tengo una colección de las fiestas de Infantil... Todavía no sé para qué los guardo.
ResponderEliminarQue no decaiga tu sentido del humor.
¡Sunsi!, te echaba de menos.
Eliminarjajajajaja, los jerseys de rombos. Yo los he usado y nunca me he sentido un arlequín, pero tu comentario me ha hecho pensar.
Aquí también tenemos todos esos disfraces de los no-sé-cuántos-festivales en los que han participado nuestros hijos
Carays, qué duro!!!
ResponderEliminarPobres arlequines.
A mí me caen bien.
Fernando, como sabes hay aquí ironía (o eso he intentado) y quizá me he pasado.
EliminarA mí, bien, lo que se dice bien, no. Pero mal tampoco. No me caen. ;-)
Jajaja! Esta entrada tan divertida habría que mandársela al pediatra que nos veía a mis hermanos y a mí cuando éramos pequeños... si ya el ir al médico a ser vacunado o a una revisión rutinaria provoca susto y rechazo en los niños, imagina lo que pasa cuando el pediatra (o su mujer o sabrá Dios quién) piensa que es una gran idea el decorar el consultorio con payasos y arlequines..... horror total, jajaja! Los tenía de muchos tamaños y colores, colocados en los estantes del consultorio e incluso tenía alguno colgando del techo como una triste marioneta. Seguro que su intención era noble y buena (quizás hacer el consultorio más amigable hacia los niños, vamos "child friendly" que se dice aquí), pero lo que conseguía era el efecto contrario, esas imagenes tristes y tétricas de los payasos y arlequines "decorativos" me causaban pesadillas.
ResponderEliminarSaludos!
¡Dios mío! vaya sufrimiento. Y seguro que lo hacía con la mejor de sus intenciones ... o no.
EliminarOdio los payasos: de todos los nombres, nacionalidades y colores. El único que no me daba grima era Miliki, siempre y cuando se quitara la nariz postiza.
ResponderEliminarBrrr.
Miliki también me gustaba a mí.
EliminarEl que me daba rabia, mucha rabia cuando era pequeño era Charlie Rivel. Se me ha quedado grabada la imagen de la primera (y última) vez que lo vi en televisión "actuando" y al oír esos aullidos me quedé aturdido.
Gran trabajo sobre algo de loq ue conocía bien poco.
ResponderEliminarGracias Modestino. Me alegro de verte por aquí.
EliminarQuédate tranquilo, eso de conocerlo poco denota normalidad. ;-)