martes, 28 de febrero de 2012

Ya vuelven los campamentos

Había empezado una entrada relacionada con los zapateros de ayer, pero cuando llevaba tres párrafos me ha parecido una tontería, o poco adecuada, o absurda, o ... ¡lo que sea! El caso es que la he borrado entera y me dispongo a escribir otra.

Ayer estuvimos en una reunión de la clase de JP donde se trataron diversos temas. Entre ellos, el de los campamentos. Me parece que todavía no he tratado este tema en el blog, así que, si os parece bien (y si no también) hoy os hablaré de eso, de los campamentos.

El colegio de nuestros hijos inició hace ya unos cuantos años la costumbre de organizar un campamento de padres (varones) e hijos. Esto se hace durante los cuatro primeros años de Primaria y se trata de pasar unos cuantos días juntos (padres e hijos), junto con varios profesores de los niños. Se hacen todo tipo de actividades y cuando los niños duermen (o al menos están en las habitaciones), los padres tenemos una tertulia muy animada.

Es gracioso ver cómo los hijos están deseando irse con su padre de campamentos y cómo esa ilusión va decreciendo de año en año hasta el punto que el último de los años (4º de Primaria) casi te preguntan con la boca pequeña si vas a ir con ellos.

La primera vez que me enteré de esta costumbre del colegio me pareció una absoluta memez y fui a regañadientes. He de reconocer que lo pasé (y lo paso) muy bien y que es una experiencia que vale la pena. He podido observar situaciones vividas por mis hijos (sin que ellos fueran conscientes de que yo estaba allí) que me han sorprendido (unas gratamente, otras no tanto). Acostumbrado a ver a tu hijo funcionando en la familia o por lo que te cuenta su tutor en el colegio, muchas veces no sabes cómo actúa con sus compañeros y allí es un buen momento para verlo. Más de un padre se ha llevado auténticas sorpresas.

Los campamentos empiezan el jueves por la mañana y acaban el sábado a media tarde. Como suponéis, la mayoría de los padres no podemos estar allí desde el primer momento, por lo que el grueso de padres suele llegar el viernes de forma escalonada. Yo, me cogeré fiesta el viernes y llegaré el jueves por la noche o el viernes a primerísima hora.

Pues como os decía al principio de la entrada, en la reunión de ayer se habló de este tema y me entró una pereza tremenda. Supongo que son cosas de la edad y que con 43 años (próximo a cumplir los 44) lo que menos te apetece es meterte a dormir con no sé cuántos padres en una habitación llena de literas, colgarte un silbato del cuello y empezar a arbitrar partidos de niños de 6 años, vigilar actividades de los niños, una prueba de la ginkana (si fuera el gin tonic, aún), etc. No me preocupa porque sé que se me pasará cuando, por ejemplo, me espabile un año más para hacer las bolsas de chucherías que se reparten a los niños el último día y "pruebe" varias de ellas ... no seáis mal pensados, lo hago para comprobar que no están malas.

Además, ya debería estar más que acostumbrado porque a mis espaldas llevo ya la friolera de 11 campamentos. El de la semana que viene será mi campamento número 12 y dos semanas después acompaño a Q. en su 4º campamento (13 para mi). Pero lo peor de todo es que cuando haya acabado los de este año, todavía me quedarán 7, 3 de JP y los 4 de S. Ya me veo yo acompañando a S en su último campamento y a algunos (jóvenes) padres murmurando entre sí aquello de "Pobre niño, se ve que su padre no ha podido venir y le acompaña su abuelo".

Lo siento Carmen, pero hoy toca ya volver a los vídeos que no te gustan, los de las BSO. Y para hoy tengo preparado el tema de la película "Kramer contra Kramer" que, aunque no sea propiamente una BSO por no haber sido creada para esta película, me gusta mucho. Allá va.


20 comentarios:

  1. Estás hecho un padrazo. Yo no sé si podría pasar por lo mismo tantas veces. Un beso.

    ResponderEliminar
  2. Madre mía!!!! Los del cole te van a contratar... jajaja seguro que tú llevas más años asistiendo al campamento que algún profesor....
    El año que dejes de ir se te echará de menos...

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Sí, es verdad, cuando acabe mis 20 campamentos habré hecho más que algún profe

      Eliminar
  3. Ostras, Pater, tienes más moral que el alcoyano...
    Y de verdad con 9 años ya no quieren que el padre vaya con ellos?
    Pido post con anécdotas de campamentos YA!

    PD: Volvió Agripina? Ella estaba en el campamento de madres y niñas? ;)

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. No es que no quieran que vaya su padre, sino que no les hace la misma ilusión que el primero. Es normal ya no son tan pequeños.

      ¿Campamento madres e hijas? Nadie lo ha propuesto, pero me cuesta imaginármelo, la verdad.

      Eliminar
  4. ¿un campamento por crío y año? ¡mortal de necesidad!

    ResponderEliminar
  5. Uy, uy, uy, que hoy la BSO le ha llegado al alma a "mi" Pater, jajaja (si no me equivoco es el cuaderno de Ana Magdalena, de Bach, ¿no?; si hasta va a parecer que tengo cultura musical y todo, jejeje). La peli me encanta, supongo que no hace falta decirlo. Pobre niño. ¡Y tercer Óscar para Meryl!
    A lo que íbamos, los campamentos. ¡Me encanta la idea! Aunque estoy de acuerdo con M&M en que A. estará con las niñas en los suyos (es un decir, si; ya me imagino donde pondría el grito Ma. si a Agripina se le ocurriera acompañarla de ese modo). Aunque también entiendo que tú estés hasta el gorro.
    Y MUCHAS GRACIAS POR EL DESEO CONCEDIDO :)))

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Ahora la curiosidad la tengo yo... ¿Cómo es posible que te haya dado su dirección de una forma privada si la tuya (e-mail) tampoco aparece por ningún lado???

      Eliminar
    2. Leles, que no te fijas. Mira en el margen izquierdo de la página, y debajo de "Qué pretendo" aparece "Contacto" y ahí está la dirección de correo electrónico. ;-)

      Eliminar
    3. jajajajajajaja, qué gilipichis que soy!!!!! jajajajaja

      Eliminar
    4. Me alegro que te haya gustado la BSO, Sara M. y sí, es Bach. ¡Qué nivel!

      Es cierto, un campamento de A con Ma a estas alturas ... buf!, no quiero ni imaginármelo.

      Eliminar
  6. ...a mi me encantaría ir a esos campamentos con mis hijas y con las madres de las otras niñas , pero mi mujer no me deja, y yo siempre hago caso de lo que dice mi mujer. Y si mi mujer se va de campamentos con mis hijas, me consuela saber que me puedo ir de campamentos a casa de mi suegra ;)

    ResponderEliminar
  7. Muy buenas, muy interesante el artículo.

    La verdad no conocía este tipo de actividades entre padres e hijos en las instalaciones del Colegio y me parece muy interesante. Es una forma de vivir en primera persona (el padre), tanto la labor del monitor o docente, como bien dices, ver el comportamiento de tu hijo en el entorno escolar, con sus compañeros.

    Saludos

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Bienvenido, Andrés. Gracias por tu comentario.

      Sí, es una buena idea. Aunque lo organice el colegio no se hace en sus instalaciones. Sería todo un poco más complicado

      Eliminar
  8. Este post demuestra mucho amor a tus hijos y mucho espíritu de sacrificio, Páterfamilias: yo ni loco iría a un sitio a dormir con señores de mi edad, y menos aún a compartir el baño con ellos. Creo que los hijos ensanchan el corazón, y que los que no los tenemos no somos capaces de hacer cosas como las que cuentas.

    Ánimo, pues.

    ResponderEliminar
  9. Gracias Fernando, me tratas demasiado bien porque no creo que sea para tanto. Eso sí, te aseguro que por los hijos haces cosas que en otras circunstancias ni te planteas.

    ResponderEliminar

Recuerda que es un blog para todos los públicos. Si vas a dejar tu comentario, procura que no sea ofensivo ni de mal gusto, así como que sea respetuoso con las opiniones de los demás. Muchas gracias