Nosotros que tenemos hijos de todas las edades y los mayores ya están algo creciditos, somos testigos directos de la depravación en el uso del lenguaje que, si no fuera porque nosotros también hemos sido jóvenes y hemos usado inadecuadamente el idioma, me atrevería a pronosticar su inminente desaparición. Este abuso es común tanto en el español como en el catalán (que también es español, pero bueno ése es otro debate).
Solo hace falta oírles hablar para darse cuenta de ello. No sé si fuera de Cataluña se usan las mismas expresiones, pero aquí está muy de moda (se lo he oído decir también a JP y S, aunque el que más la usa sin duda es Q.) la expresión "zasca". Tras un detallado estudio de ésta, puedo concluir que vendría a ser el "toma corte" que se usaba en nuestra época. Un ejemplo podría ser el episodio vivido con la Mossa d'Esquadra y explicado ayer cuando, comentando el ingreso en prisión de mi cliente (tranquila Carmen, ya explicaré este asunto), le digo que "se le ha ido la pinza" y ella contesta eso de "Sí, la próxima vez que se lo piense mejor" y yo le suelto aquello de "no, a la Juez, se le ha ido la pinza a la Juez". Si hubiera estado presente alguno de mis hijos, habría soltado un sonoro "zasssscaaaaaa".
Bueno, me estoy yendo por las ramas porque yo quería escribir sobre alguna de las famosas frases usadas por mi madre y que ya forman parte de la historia familiar. Vamos, imagino que como en todas las familias. Alguna de las más conocidas son:
- Un caló forahtero (un calor forastero): Esta frase la usaba mi madre cuando, por ejemplo, aparecías en pleno mes de febrero en manga corta. Ella, al verte, te decía "Niño, ¿qué hase así?". Cuando contestabas aquello de "Es que hace calor", inmediatamente decía "Sí, claro, un caló forahtero". Al final, evidentemente, solías acabar con un jersey puesto.
- Ni al casó la manteca (Ni al que asó la manteca): Se usaba como respuesta ante una ocurrencia (normalmente extravagante) de otro. Ejemplo: "Niño, ¿qué hasen todah ehtah monedah en la lavadora?" "Nada, es que quería que se limpiaran". "Eso no se le ocurre ni al casó la manteca"
- Contar frailes (idem): Respuesta que daba mi madre cada vez que salían de casa (a una reunión del colegio, a casa de unos amigos ...) y no quería dar explicaciones. "Mamá, ¿adónde vais? A contar frailes, que dicen que falta uno"
- Como un perro balduendo (idem): Usaba esta expresión cuando llegabas tarde a casa y al preguntarte dónde habías estado contestabas aquello de "Nada, dando una vuelta con los amigos". "Como un perro balduendo, ¿no? Anda, pasa, pasa"
- Aperreá (aperreada): Expresión que utilizaba para demostrar su cansancio. Tras un intenso día podía decir "Ehtoy aperreá".
- Pesa máh qun moro ahogao (Pesa más que un moro ahogado): Es una medida de peso. Cuando algo pesa mucho, pesa más que un moro "ahogao". Recuerdo de niño haberle preguntado su significado y me dijo algo así "Niño, tú timahina lo que eh sacar a un moro del agua, con toa esas ropah."
- El moro Musa (El moro Muza): Yo creyendo que se trataba de un personaje ficticio y resultó ser real e histórico. Solía utilizar este nombre cuando algo desaparecía, aunque no misteriosamente (o sí, pero solo para un niño). "¿Dónde está (lo que sea)? Lo tendrá el moro Musa"
- Pueh ni patah ni alah tiene (Pues ni patas ni alas tiene): Cuando no encontrábamos algo, un jersey por ejemplo, nos decía "Ya puedes estar buscándolo, pues ni patah ni alah tiene"
Como habréis podido deducir -aunque no esté muy logrado su acento-, mi madre es sevillana, de esas con un acento muy gracioso que todavía conserva.
Es ya muy tarde para una BSO, así que habrá que esperar, aunque ya os adelanto que no quedan muchas.
- Pesa máh qun moro ahogao (Pesa más que un moro ahogado): Es una medida de peso. Cuando algo pesa mucho, pesa más que un moro "ahogao". Recuerdo de niño haberle preguntado su significado y me dijo algo así "Niño, tú timahina lo que eh sacar a un moro del agua, con toa esas ropah."
- El moro Musa (El moro Muza): Yo creyendo que se trataba de un personaje ficticio y resultó ser real e histórico. Solía utilizar este nombre cuando algo desaparecía, aunque no misteriosamente (o sí, pero solo para un niño). "¿Dónde está (lo que sea)? Lo tendrá el moro Musa"
- Pueh ni patah ni alah tiene (Pues ni patas ni alas tiene): Cuando no encontrábamos algo, un jersey por ejemplo, nos decía "Ya puedes estar buscándolo, pues ni patah ni alah tiene"
Como habréis podido deducir -aunque no esté muy logrado su acento-, mi madre es sevillana, de esas con un acento muy gracioso que todavía conserva.
Es ya muy tarde para una BSO, así que habrá que esperar, aunque ya os adelanto que no quedan muchas.
Una preguntilla Páter, tu madre qué es ¿sevillana, o sevillista?
ResponderEliminarSevillana es y sevillista, no sé, empiezo a tener mis dudas. Antes, cuando vivía en Sevilla, lo era. De hecho iba muchas veces al Sánchez Pizjuán junto con mi padre, que era socio. Ahora, después de tantos años junto a mi padre quizá se le ha pegado algo de su barcelonismo. ¡Sí, mi padre -desde pequeño- es culé!
EliminarPater, yo seguía un blog que no recuerdo cómo se llamaba, pero el tipo había escrito el calendario andurrialés, se parecía mucho a lo que tu madre decía...
ResponderEliminarAh, pues podría ser interesante. La mayoría de sus frases eran heredadas (alguna sería propia) y, ya de mayor, descubrí que todas tienen sentido. Me explico, eso del perro balduendo no tenía ni idea qué era, hasta que averigüé que se trataba de aquellos perros de caza que se perdían en la montaña y andaban por ahí sueltos.
EliminarNo conocía muchas. Mi madre dice frases asturianas. A mí me encantan esas expresiones. Un beso.
ResponderEliminarCada zona tiene sus frases propias, Susana. Estaría bien que recopilaras unas cuantas suyas y verás lo interesante que resulta.
EliminarRecuerdo que esa respuesta nos ponía bastante nerviosos por aquello de no contestar (ahora que uno es padre, entiende perfectamente esas situaciones en las que no te apetece dar ninguna explicación)
ResponderEliminarPues aperreá para nosotros tiene otro sentido. Nosotros (que no vivimos muy lejos de sevilla) la usamos para decir que estamos tontos, sin ganas de hacer nada, pero no tiene que ser por cansancio. Esos domingos viendo la peli de antena 3 y hay gusa y no hay ganas de hacer nada...
ResponderEliminarY como yo también seguía el diccionario andurrialero (además te voy a dar una alegria) te dejo el enlace al diccionario, pero por favor, vé a la página inicial que tiene un post del 27 de marzo que te vas a mear de la risa y luego más abajo está la sorpresa...
http://jmridao.blogspot.com.es/search/label/Diccionario%20andurrialero
Mi madre usa "aperreá" como sinónimo de "máh cansá cun perro", de hecho las alterna.
EliminarEl sentido que le dais vosotros es muy divertido y muy acertado. Vamos, se debe dar en aquellas situaciones en las que solo falta ladrar para parecer un perro.
¡Gracias, Merengaza! Muy divertido ese blog y ... ¡sorpresón!, otro sevillista. ;-)
¡Me encantan las frases de las madres! Igual te copio la idea, porque mi madre tiene algunas buenísimas. Aunque con acento madrileño, que no tiene guasa, pero queda castizo.
ResponderEliminarAlgunas también las dice mi madre: lo del moro Muza, aperreada (ya te digo que hay acentos menos guasones) y lo del que asó la manteca. Bueno, las dice mi madre y también las digo yo, no te creas.
Muy bueno.
Y no se me olvida que me debes una explicación!! :-)
ResponderEliminar¡Ja, ja, ja! Qué gracia tiene tu madre! Algunas las conocía, pero otras no y me he reído mucho!
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