Hace unos años, no se sabe muy bien cómo, empezó en casa una "tradición" (que cuando empezó no lo era, claro está) consistente en ir a ver un partido del Sevilla en su estadio, en el Ramón Sánchez Pizjuán. La primera vez fuimos A. y yo con Ma. y P. y mientras P. y yo veíamos el partido, Ma. y A. se dedicaron a pasear por el centro comercial contiguo al estadio. Fuimos en mayo de 2004, coincidiendo nuestro viaje de ida con la boda de Felipe y Letizia (recuerdo las imágenes en los televisores de la sala de espera del aeropuerto). El partido fue un Sevilla-Osasuna (1-0) que significó la clasificación para disputar la Copa de la UEFA, la primera de las ocho clasificaciones consecutivas para competición europea y el inicio de la más brillante historia del Sevilla.
Aquello fue la puntilla para que el sevillismo de P. (¡atención a la cursilería!) quedara grabado a fuego en su corazón. Nunca olvidaré la sorpresa de P. cuando, vestido con la equipación del Sevilla, nos dirigíamos al campo y a medida que nos acercábamos empezó a ver cada vez más gente con camisetas del Sevilla, banderas y bufandas. Mi hermano P. consiguió que P. pudiera fotografiarse en el césped con el equipo (ya sabéis, la típica foto que se hace el equipo local con no sé cuántos niños antes de empezar un partido) y como la asistencia al partido fue masiva, la cara de P. era de absoluta alegría comprobando que no era un "bicho raro". Me explico, cuando P. iba a P-3 llegó un día a casa por la tarde diciéndome -incrédulo- que en su clase ¡no había nadie del Sevilla!
- "¿Cómo?, ¿nadie?", le dije yo mientras intentaba encontrar una explicación convincente para su edad.
- "Noooooooo, nadie"
- "Jo, pues vaya cole ..." Lo sé, no fue muy acertado, pero no se me ocurrió nada mejor.
Como decía, aquella tarde-noche hizo que P. nunca más se sintiera diferente. Sigue siendo el único, no de su clase, sino de todo el cole si exceptuamos a sus hermanos, pero ya le da igual, incluso le gusta porque le hace único.
Años más tarde, en noviembre de 2006, fui con Mi. El partido elegido fue un Sevilla-Valencia (3-0) y la sopresa que mi hermano P. nos tenía preparada fue que al día siguiente del partido, fuimos a la Ciudad Deportiva a ver el entrenamiento del equipo, allí recogimos a Jesús Navas y nos acompañó al aeropuerto, donde tomamos algo con él, a despedirnos. También fue un baño de sevillismo para Mi.
En ambos casos, mis hijos -casualmente- tenían 7 años cuando vivieron esta experiencia, por lo que Q., el siguiente si seguimos el orden de edad, lleva 3 años "recordándome" que le tocaba a él, pero las circunstancias no facilitaban este viaje. Hace poco, encontré una oferta para viajar a Sevilla, miré el calendario y comprobé que el lunes, 3 de diciembre juegan en el Sánchez Pizjuán el Sevilla y el Valladolid. Comentamos la circunstancia con el profesor de Q. y ante su autorización, reservé los billetes. El lunes, muy temprano nos vamos a Sevilla Q. y yo. En esta ocasión, mi hermano P. está haciendo gestiones con un miembro de la directiva del club para conseguirnos 2 entradas. Si no lo consigue, las compraremos el lunes en la taquilla (he visto que las más baratas son a 15 €) y ya está.
Me parece que el siguiente será JP dentro de un tiempo.
Ah, si alguno está pensando que S. también tiene que ir, no está tan claro. S., con total "libertad materna" decidió ser del Barça. Aaaaahhhh, se sienteeeeee.
¡Qué gran noticia!
ResponderEliminarEspero que lo paséis bien, y que gane el Sevilla, claro, ya sólo le queda un pasito para estar en Europa.
Gracias!!
EliminarOjalá gane, pero Europa está algo más lejos
¡¡Pues a disfrutarlo!! Además por lo que he leído, siempre que vais a verlo, gana así que tu hermano os presente a la directiva como unos auténticos talismanes para el club. Entradas gratis en palco VIP.
ResponderEliminarBueno, luego le quedará el viaje a S (no vamos a discriminarlo por ser del Barcelona ¿verdaaaaaaaaadddd?)
Y como le corresponde viaje como al resto, le tocará un partido que juegue el Barsa fuera...por ejemplo de Champion :P
Que lo disfruteissss.
Besazo
Es cierto!, esperemos que no se rompa la racha. Me pensaré eso de contactar con la directiva y ofrecerles nuestros servicios.
EliminarLo de S ya veremos. ¿Un partido de Champions? Como esto siga así lo llevaré a ver un Manlleu-Barça
Jo, suena genial. Cruzaré los dedos para que además el Sevilla gane, aunque no lo dudo. Ya nos contarás que tal. Yo ese mismo día un poquito más tarde (por el tema de la diferencia horaria) estaré en las pirámides viendo la alineación planetaria que solo se produce cada 2700 años. Día especial para todos.
ResponderEliminarSaludos!
¡Mala pécora (con todo el cariño del mundo)!
EliminarMira que yo soy futbolera, pero esas comparaciones son odiosas. No sé porqué, pero me tiraría más estar contigo ese día que con Páter y Q.
Geacias!!
EliminarOye, tu plan tiene muy buena pinta. Me lo apunto y quizá vaya el próximo, dentro de 2.700 años (quizá tendré que ir acompañado) ;-)
Bueno, pues encima tenéis suerte. Antes de que me grites, si, ya lo sé, pero necesito desahogarme, ¡vaya precios! Si, te costará el vuelo, pero, ¿una entrada 20€, y en el Sánchez Pizjuán 15€? En serio, vaya morro. Las entradas del Madrid son prohibitivas :((
ResponderEliminarNosotros hemos ido unas cuantas veces, pero de solteros. Y no séra que mi pobre hijo no nos lo ha pedido.
¿Prefieres ver una alineación planetaria a la que puedes ir cada 2.700 años que a un partido del Sevilla? Ande vas a parar!!!
EliminarTodas son prohibitivas. En este partido, no sé por qué, los precios son más económicos
EliminarJo, es un planazo!
ResponderEliminarY tu hermano P. es un crack consiguiendo cosas, no? A qué se dedica exacatamente para conseguir esos "favores"?
Parece que además de S, se te ha olvidado comentar que en casa tenéis otro esquirol no sevillista, no?
O es que pasear por el centro comercial de al lado cuenta? Tendrás que pensar en llevarte de viaje a la niña, a ver... digamos... un concierto...
Ejem... veo mucha discriminación hacia los no sevillistas...
Por partes:
ResponderEliminarEste hermano mío es sacerdote en Sevilla y dio la casualidad que dio clases a Jesús Navas e hizo amistad con la familia. Ahora tiene cierto trato con Negredo y da clase a un hijo de uno de la directiva. Cosas que pasan.
El otro miembro no sevillista de la familia es A.
¿Discriminación? Ninguna, pero ... ¿para qué lo voy a llevar a ver un partido del Sevilla si es del Barça? ;-)
Sííííí, lo que faltaba
ResponderEliminarBuf, pues ya ha empezado mal. Con decirte que el vuelo era el de las 08:00 h y todavía estamos en el aeropuerto. Ya os contaré, pero llevo un cabreo ...
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