Algunos defienden su postura con aquello de que cuando éramos pequeños no teníamos deberes (sólo los que no habían aprovechado el curso y debían hacer en verano aquello que no hicieron cuando tocaba), otros con que son niños y están de vacaciones, por lo que no es necesario "castigarlos" de esta manera. Como en muchas otras ocasiones, me parece que tanto unos como otros tienen razón. Soy de la opinión de que es bueno que hagan deberes en verano, pero si vierais la cantidad de deberes que tenía Q (era exagerado) pensaríais igual. Para que Q. acabara su cuaderno de verano debía dedicar una media de 45 minutos diarios. Si a eso le añadimos que Q. es un poco más ... disperso, sale que su dedicación mínima debía ser de 1 hora y 30 minutos, cosa que, como podéis imaginar, no ha hemos hecho.
Además, todos sabemos que los deberes no son sólo para los niños, sino también para los padres. Y no me quejo de ello, asumo que es así, pero, como todo, dentro de una medida. Alguno puede pensar que como tengo muchos hijos es normal que piense así y que es lo que tiene, pero no, pensaría lo mismo aunque sólo tuviera a Q. Da lo mismo tener uno o varios, porque a la hora de hacer los deberes se ponen todos (unos son más remolones que otros), el horario era para todos.
Uno de los padres con los que he hablado me dijo que llegó a poner una nota en la libreta con un texto que decía "Hoy no ha hecho los deberes porque yo no le he dejado. Le he dicho que hoy tocaba fiesta".
Sé que estáis todos muy preocupados por saber cómo fueron los partidos de Pro Evolution Soccer de ayer. Pues fueron muy bien y, para vuestra tranquilidad, deciros que gané formando pareja con A., también formando pareja con S y lo mismo formando pareja con R. Sacad las conclusiones que queráis, pero yo lo tengo muy claro. Fue una velada perfecta.
Ahora intentaré hacer unos deberes que, desde ayer, tengo pendientes:
Un saludo a Bate
Ahora intentaré hacer unos deberes que, desde ayer, tengo pendientes:
Un saludo a Bate
Pocas veces compré cuadernillos de verano! sólo una libreta para cada uno donde les dictaba palabras con bes y uves, sumas y poco más. Muchos libros para leer, eso sí!
ResponderEliminarI'm sorry Santillana!
Los deberes de verano, ¡uf, vaya temita!. Para resumir muy mucho, estoy de acuerdo con Marta en lo de leer, y a partir de 4º de Primaria, como mucho, NADA MÁS. Mi hijo este curso ha empezado 3º, y ha hecho algo más, pero porque yo he querido (la seño les mandó 3 libros, yo le dije que solo le compraba uno, y ese se ha quedado sin terminar por unas 8 pág.), y le he hecho que hiciera una pequeña copia, solo unas tres frases, todos los días. Solo quería que no perdiera hábito de escribir, que en esa edad, y más por sus características, se nota mucho. Pero no quería que un niño que terminó el curso muy bien, pero hecho polvo, empezara otro tan importante como es 3º (no sé por ahí, pero aquí 3º es el cambio más significativo, y luego el paso a la ESO) cansado y sin ganas de empezar con tanta cosa nueva como se le viene encima. HE DICHO.
ResponderEliminarQuien ha cumplido el curso satisfactoriamente debría tener los veranos para disfrutar, digo yo.
ResponderEliminarAnimos¡¡¡
Alguna vez me he tenido que poner a hacer los deberes con ellos, pero ahora que son más mayores ya no les mandan casi nada.
ResponderEliminarJajajaja... qué arte.
ResponderEliminarTe juro que venía preparado para explicarte en la anterior entrada cómo es eso de los enlaces, pero menos mal que me ha dado por leer el nuevo post. Te felicito, ahora el siguiente paso es aprender -si no sabes- a enlazar en los comentarios con otro lugar.
Mi niña es muy chica para hacer deberes. Tampoco está mal que no pierdan de vista el contacto con los libros, los cuadernos y la memoria.
Aunque no tan exagerao como lo que cuentas.
Buenos días
Uyyyy, Pater. Has topado con una anti-deberes con pancarta. He alucinado este verano con mi sobrina que cursará 2º de Bat (en Cataluña se usa este diminutivo). A la criatura, después de un 1º durillo y el consiguiente "Treball de Recerca" (Trabajo de Investigación)la han cargado con tantos deberes que por poco no los termina. Y me consta que es una curranta.
ResponderEliminarMi opción: el ocio creativo. Durante el curso no tienen tiempo para leer por...¡¡¡la cantidad de deberes!!! Tampoco en Navidad y Semana Santa por...¡¡¡los dichosos deberes!!! Así que creo que en verano, sin prisas,con libros bien elegidos y sin el consabido resumen (la obligación de leer es el mejor sistema para aburrir la lectura de por vida) es un momento muy bueno para que se enfrasquen con un libro. Y después otro... y otro.
En serio, Pater. En mis épocas teníamos tiempo durante el curso para hacer alguna cosa más que las tareas que te mandaban en el cole, incluido leer. Y no fuimos precisamente menos cultos que la actual generación.
Cuando se ponen deberes creo que se han de cumplir unos requisitos:
-que se trate de algo que ya se haya trabajado en clase.
-que se trate de un refuerzo que el alumno sepa resolver sin ayuda. No hace falta que los papis volvamos a cursar primaria o ESO...
-que la finalidad sea crear hábitos, teniendo en cuenta que también forman parte de los buenos hábitos colaborar en casa... visitar a la tieta que está enferma...A veces hay tantos deberes que uno no puede tener ni un dolor de barriga.
- y bajo el lema "despacito y buena letra..."; que prime la calidad frente a la cantidad.
¿Sabes qué pasa, Pater? Que se trabaja poco en clase. Que además de clases explicativas ha de haber clases en las que los alumnos trabajen y el o la profe se pasee para saber a quién le cuesta qué. Las dudas debe solucionarlas, en principio y si no hay problemas de otra índole, el profesor. Y es entonces cuando de verdad puedes exigir porque sabes hasta dónde y cómo.
Perdona, Pater. Me parece que es más que evidente que esta ha sido un lucha sin cuartel durante muchos años. También por mi profesión, aunque ahora no ejerza, lo he puesto en práctica. Sé que se puede enseñar con exigencia de otra forma que no se reduzca a deberes al cubo y exámenes día sí día no...
Ufffffffffffffffffff. Lo siento. ¿Te vale una aspirina?
¡Sunsi, quiero una entrada en tu blog YA acerca de este tema!. Por supuesto por favor...
ResponderEliminarEl éxito de los niños en la escuela es directamente proporcional al interés que se tomen los padres por sus estudios. Y ese interés debe ser constante y en cualquier época del año.
ResponderEliminarMientras veía la final del Europeo de Baloncesto -que hemos ganado!!- se me ocurrió esta esclarecedora y fantástica frase que remueve los cimientos de la educación en España.
Totalmente de acuerdo contigo Marta. Deberían leer y no hacer tantos deberes.
ResponderEliminarEso es Sara M., sería que no perdieran el hábito, pero de ahí a casi seguir con el ritmo del colegio.
Así es Modestino. Creo que no es tan difícil de entender.
Esa es otra, Susana. Cuando son mayores, nada de nada.
Bate, ¿has visto que lo he conseguido? Con todo, debe haber una forma más sencilla, porque me ha llevado un buen rato. Y otra es enlazar también en los comentario. No hay manera y leyendo otros blogs, veo que hay gente que lo hace.
Sunsi, buenísimo tu comentario. Tú si que lo has explicado bien. Por cierto, es la primera vez que veo un comentario más largo que una entrada ;-)
Jó, Bate, soy incapaz de ver el baloncesto (somos los mejores) y a la vez pensar en otra cosa. ;-)
Es que se me ocurrió que somos los mejores en baloncesto y en otras disciplina sencillamente por el trabajo constante y la motivación extra que les inculcaron los padres a estos esplendidos deportistas. ¿Te imaginas el futuro que tendría un país en el que los padres apoyaran a sus hijos en los estudios como lo hacen algunos en los deportes?. Es 2000 millones de veces más seguro que tu hijo te salga un buen ingeniero o un magnífico violinista a que tú vástago se convierta en el siguiente Nadal.
ResponderEliminarCuando tenga un rato intento explicarte cómo se enlaza en sus diferentes modalidades.
El problema de eso que dices Bate, es que algunos padres se obsesionan porque sus hijos destaquen (tanto en los estudios como en el deporte) y presionan excesivamente a sus hijos. Yo creo que a un niño se le puede exigir hasta cierto nivel en los estudios (completamente de acuerdo con la proporción que mencionas), pero no puedes poner a un niño a estudiar con siete años hasta las doce de la noche si el pobre "no da para más". Y peor todavía con el deporte; he visto verdaderas aberraciones cometidas por los padres, y los pobres niños obligados a hacer algo que no les gusta, y encima no es obligatorio...
ResponderEliminarSí, Sara, entiendo perfectamente lo que expones, y no te falta razón. Pero en estos momentos, si de algo adolecen la mayoría de padres de este país es de todo lo contrario, es decir, de la falta de ganas o motivación para inocular -perdón por el palabro- en sus hijos la inquietud necesaria para que puedan sentir verdadera pasión por los conocimientos. Esto es difícil cuando los pobres mayormente ven a sus padres más enganchaos al mando a distancia de la tv -y qué tv, Dios santo!- que a un libro.
ResponderEliminarLo que me lleva siempre a la misma idea que me lleva torturando hace años: los que manejan los hilos del poder, que están ahí, que existen, prefieren ciudadanos "aborregables" que ciudadanos formados y con capacidad de pensar por si solos.
No digo nada nuevo, pero no está de más recordarlo.
Un cordial saludo desde una sierra de Madrid con una jarta de frío.
Me comprometo, Sara. Primero tengo que hacer un guión porque ya ves, se me dispara la adrenalina. Es un tema delicado que divide a padres y profes.
ResponderEliminarPater... Siento la extensión. Lo peor del asunto es que se me han quedado muchas cosas en el tintero;-) Calcula...