lunes, 21 de febrero de 2011

Calçotada y costellada

Ayer domingo celebramos con unos amigos la primera calçotada del año. Como nosotros no nos conformamos con cualquier cosa, aprovechamos para hacer también una costellada.

Para el que no esté muy puesto y de forma muy resumida os diré que la calçotada es originaria de Valls (Tarragona) y consiste en comer calçots (guau, qué lince), que es una especie de cebolletas. Normalmente se hacen con llamas (no a la brasa) y los puristas dicen que debe ser con llama de sarmientos. Se acompañan con una salsa, cuyo nombre no recuerdo y que es muy similar a la romesco.

La costellada en cambio viene a ser la barbacoa de toda la vida, sólo que por estas latitudes cambia de nombre. Ya sabéis, carne a la brasa, básicamente cordero y butifarra. Todo eso con su salsa allioli, que está muy buena y te recuerda constantemente que has estado en una costellada.

Si buscáis por internet (sólo hace falta poner en Google "calçots"), veréis que los comensales usan baberos (pitets) para engullir ese manjar. A mí me resulta un poco ordinario (extra-ordinario, diría), pero temo que alguien se ofenda. Será que soy muy señorito para ésta y otras cosas, así que suficientemente mal lo paso comiendo con los dedos como para encima ponerme un babero. No exagero, si lo probáis veréis cómo acaban vuestras manos.

Estuvimos en una casa que tienen mis padres en un pueblo de la comarca de La Selva, provincia de Girona. Desconozco el origen del nombre de la comarca, pero dudo que sea por su fauna y su flora. Vamos, allí no encontrarás gorilas ni pájaros exóticos.


La climatología no nos acompañó, pues llovía y salía el sol a intervalos, lo cual complica un poco el plan teniendo en cuenta que allí estábamos con 14,5 niños. Lo cierto es que lo pasamos muy bien y la compañía fue de lo más agradable.

8 comentarios:

  1. Mañana tengo calçotada en Salomó (Tarragona), al calçot nº 32 uno empieza a hartarse ...;).

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  2. Hola, Pater. Lástima de tiempo... Lo has ambientado divinamente;-)
    En casa del herrero... Todavía no he probado ni un calçot y el año pasado creo que tampoco. Y me encantan... La salsa diría que no tiene nombre. Es como tú dices: una especie de romescu. Imprescindible la ñora.

    Si no estás en pleno fandango resulta incluso grotesco ver una panda de señores y señoras, con enormes baberos, la boca abierta hacia arriba engullendo una cebolleta por la que se escurre un líquido rosado.¡¡¡Extra-Ordinario!!!jajajaja... Como dice mi padre, "a la brutesca". Las manos negras y ese aroma inequívoco que desprendes... y te llevas a casa... de cebolla y ajo. Todo un ritual... No apto para quien no le guste comer con las manos.

    "Hola...Vengo de una calçotada..." "¿A sí? Pues fíjate que no lo había notado";)

    Me he reído mucho con tu post.
    Saludos...

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  3. Modestino: ¡Es verdad!, a partir del calçot nº 32 como que no, que ya no están tan buenos ... jajajaja

    Sunsi: El que no los hayas probado demuestra que estás por encima de ciertas cosas ;-)

    A mí me resulta algo grotesco, como tú dices, aun estando en pleno fandango, pero bueno, un día es un día.

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  4. Hola, Paterfamilias, fui hace poco a comer al restaruante catalán Can Punyetes, en Madrid, y en dos mesas vecinas habían pedido los calçots. Era sencillamente patético ver comerlos, sin babero, sin práctica, sin acierto, poniendo cara muy seria en plan de "yo también soy catalán". A lo mejor es la época de tomarlos y querían integrarse en la catalanidad, acá lejos en Madrid.

    Pedí asado de tira, más fácil de comer.

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  5. Fernando: Te puedo asegurar que con babero es todavía más patético y si, como dice Sunsi, "regalima" (te chorrea) por la comisura de los labios la salsa romesco ... ya es para dejar de comer, levantarte de la mesa y ponerte a aplaudir.

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  6. Qué envidia! Nunca he estado en una calçotada, pero suena estupendo...

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  7. Anda Pater, a ver si organizas una calçotada para tus amigos virtuales!!

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  8. ND: Está bien, pero hay que estar prevenido sobre lo del babero y la forma en que se comen: con las manos, cogiéndolos con los dedos pulgar, índice y corazón, subirlo muy alto, inclinar la cabeza hacia arriba y empezar a engullirlo. Eso sí, son buenos, muy buenos.

    Anónimo: ¡Buena idea!, pero también será virtual

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