martes, 30 de agosto de 2011

Más de animales

Esto de los animales da para mucho. Este verano en Lastanosa hemos vivido diferentes momentos en función del animal que se tratara. Podríamos hacer una pequeña lista:

- Salamanquesas: No son las oriundas de Salamanca, ni las nobles de aquella ciudad (comprimiendo "Salamanca" con "Marquesa" podría salir eso. Ya vendrá Tomae y nos sacará de dudas). Son aquella especie de lagartijas nocturnas que se encuentran en las paredes de casi todas las casas de los pueblos. Pues bien, una de las más frecuentes actividades de este verano consistía en eso, en ir a cogerlas, guardarlas en un bote y -si seguían vivas- soltarlas al día siguiente.

Mis hijos decían que se iban a cazar "dragonets", que es como se les llama en Cataluña. La verdad es que impacta más verlos salir a cazar dragonets, que no salamanquesas.


- Arañas: Lo que se dice arañas, no hemos visto tantas, eso sí estaba lleno de aquellas que tienen las patas muy largas y el cuerpo muy pequeño (cuando éramos pequeños, en casa, las llamábamos "patislarguis"). Hace ya unos años, en una tertulia con varios de mis hermanos, apareció una de éstas y mi hermana pequeña aprovechó para decirnos que no era propiamente una araña, sino que se trataba de un "Opilion". Rápidamente saltó mi hermano N. y dijo "En mi opilión es una araña". Todavía hoy me río. JP va más allá y las llama tarántulas. Se ha pasado este verano gritando "unaaa tarántulaaaaa" cada vez que veía a ese bicho.


- Pájaros: Aquí ya nos hemos hartado de verlos. Lastanosa es un pueblo muy dado a que los pájaros caigan de sus nidos. No me preguntéis por qué, pero así es. Un día, estaba paseando con JP y S cuando vimos a dos polluelos que habían caído del nido. Seguramente debía hacer poco tiempo porque seguían vivos aunque no hacía falta ser un experto, para ver que les quedaba menos de un telediario. En éstas estábamos cuando, de repente, cayó un tercer pájaro. No sabéis la impresión que eso causó en los niños (bueno, y en mí).

Siguiendo con el tema, a los pocos días de ese acontecimiento me dirigía yo con los mismos protagonistas a la piscina cuando vimos a un gato saltar sobre un matorral y llevarse entre sus fauces a un pájaro. Sólo veíamos su último aletear.

Ya, para acabar de rematar (ops, ha sido sin querer, pero la palabra viene que ni pintada) el tema, otro día recogimos un polluelo que no sé quien se encontró. Ma. se encargó de darle comida con unas pinzas, pero la Providencia (aún no sé si utilizando a JP como instrumento) decidió que debía pasar a vivir al "Paraíso de los pájaros". Así que, eso, se quedó pajarito.


- Mosquitos: Han sido, con diferencia, los más abundantes. Como quiera que Lastanosa está rodeada de campos de regadío, estos insectos proliferan con gran facilidad. Es de agradecer que establecían unos horarios, por lo que, si no hacía viento, llegada su hora arribaban como auténticos escuadrones de la muerte para chupar sangre a todo el que se pusiera a su alcance. En esta época hacen su agosto.



- Caracoles: Sin duda, los mejores. Un día nos levantamos al amanecer y Q., JP y yo nos fuimos a "cazar" caracoles por los campos de alrededor. Como acababan de regar y el sol no apretaba lo suficiente, pudimos coger unos cuantos. Pasados unos días, Je. nos hizo unos caracoles para chuparse los dedos.



- Cochinillas (o bichos-bola, para entendernos): Daban su juego a falta de alguno de los anteriores. En alguna de las noches en las que los más pequeños no conseguían cazar ninguna salamanquesa o cualquier especie más preciada, se dedicaban a coger los bichos-bola.


- Libélulas (Ibéuas, según S.): Muy abundantes en la piscina. Los colores de moda este verano, el rojo y el amarillo-dorado. Más de una era azul y no sé si era color de otra temporada anterior o unas adelantadas a su tiempo. Mis hijos intentaban con gran esfuerzo cazarlas y alguna vez (rara) lo conseguían. JP se especializó en recoger del agua a aquellas que en un exceso de confianza caían a la piscina. Como en muchos de los casos aún estaban vivas, las dejaba secar con mucho mimo y las toqueteaba hasta que -otra vez- no podían volar. Siempre se preguntaba por qué no podían volar si ya tenían las alas secas. Lo mejor era no contestarle.



- Lagartijas: Difíciles, pero no imposible, de coger. A Q. y JP les encantan. Al igual que las salamanquesas solían llegar sin cola (¿será una mutación de Lastanosa?), pero eso no impedía que disfrutaran con ellas. Es altamente desaconsejable acompañar a los niños a cazarlas, hace un calor horroroso.



Otro día, hablaremos de los alimentos que por allí se pueden encontrar.

5 comentarios:

  1. Me ha hecho mucha gracia lo de Ibeua ;)

    ResponderEliminar
  2. ¿Y después de todas estas experiencias bichiles a tus hijos aún les quedan ganas de tener una mascota??
    Pá matarlos!! jajajajaja.
    Por cierto, o no te quería decir nada, pero no sé porqué te opones tanto cuando tú tienes pecera!!! (y hablando del tema... ¿cuál es mi premio por alimentar a tus pececillos?, aunqeu no sé qué clase de comida les pongo, porque no crecen nada de nada).
    Bicos

    ResponderEliminar
  3. Madre mía, se nota que no son hijos míos. Me dan asco y pánico todas y cada una de las especies que has nombrado (bueno, las arañas menos, y los pájaros). Además no les dejaría, pero es que yo creo que ellos tampoco lo intentarían.

    ResponderEliminar
  4. jajaja Pater, iba a venir por "aluviones" pero no caeré en la trampa del Salmón con queso... Desde luego si uno de ellos me trae un mosquito de esos...¡lo mato! Saludos!

    ...vaya que si lo mato!!!

    Un día te contaré lo de la reproducción del caracol, ahora no que hay niños...

    ResponderEliminar
  5. Cómo ha dado de sí Lastanosa en lo que a bichos se refiere. He observado que no mentas a A. Saco la conclusión de que huía de vuestras cacerías. Yo hubiera hecho lo mismo, Pater.

    Ya dirás hasta cuándo aguantáis sin mascota. Veo a tu tropa muy puesta en el tema bichos.

    Un saludo invertebrado, Pater

    ResponderEliminar

Recuerda que es un blog para todos los públicos. Si vas a dejar tu comentario, procura que no sea ofensivo ni de mal gusto, así como que sea respetuoso con las opiniones de los demás. Muchas gracias