Hace unos días me contaba Q. que está elaborando una lista con las cosas que quiere hacer cuando sea mayor. No soy capaz de recordar todas (porque yo sí que ya me he hecho mayor), pero sí algunas, supongo que las que más me llamaron la atención. Allá van:
- Poner un petardo en uno de esos hormigueros que aparecen en los documentales de La 2 (que levante la mano el que ha conseguido ver uno entero sentado o tumbado en el sofá) y que la entrada es como una chimenea. ¿Sabéis, no? ...
¡Y éste es aquel al que le gustan los animales!
- Tirarse en paracaídas en medio del océano
No sé qué puede tener esto de atractivo, pero parece que le hace hacía especial ilusión. He corregido el tiempo verbal conscientemente porque, al acabar de decirme eso, añadió que no está del todo seguro porque al parecer, el profesor de Ciencias Naturales les explicó algo acerca de las altísimas probabilidades de morir que uno tiene cuando hace semejante ... ¿qué pongo? ... barbaridad.
Tampoco quise yo desanimarle haciéndole ver que eso está muy bien, pero que cuál era su plan una vez ya ha caído en medio del océano. No sé si lo había pensado, pero me temo que no.
- Subir a un taxi y decir "Siga a ese coche"
Bien, aquí ya no supe qué decirle a parte de un "Ah, ... ya"
Lo que también recuerdo es que me comentó una cosa que no quería hacer: puenting. No es que me preocupe lo anterior (dudo que llegue a hacerlo algún día y si lo hace tampoco parece excesivamente peligroso ... o sí, no sé), pero lo del puenting es como más fácil de cumplir y todos hemos visto u oído algún accidente mientras se practica. Accidente, por otro lado, con consecuencias normalmente fatales.
No sé si es que tiene mucha imaginación o ve mucha tele ... o las dos cosas, pero lo cierto es que hizo que me acordara de alguno de mis sueños infantiles y lejos de cundirme el desánimo por no haber cumplido ni uno solo de ellos, una emoción me embargó al comprobar que he cumplido uno con el que ni siquiera había soñado: Formar esta familia con A.
PS Si, ya sé, he escrito dos entradas seguidas. Y no, no me he vuelto loco.
Ohhh qué bonito final para esta entrada....
ResponderEliminarLo del taxi me ha hecho mucha gracia!! Jajaja claro que lo de caer en el océano, en fin, sin comentarios. Jajaja
Besos!!
Sí, eso del taxi es muy fuerte ;-)
EliminarPor favor, dile que lo del petardo no lo haga!!! Pero oye, tienes razón... cuantas cosas se nos olvidan. yo quería ser activista de Greenpeace!
ResponderEliminarNo sufras, no creo que lo haga.
EliminarAh, pero ¿no lo eres? ;-)
Decididamente a Q. le va el riesgo y la acción. Seguro que se ha imaginado muchas veces subido a un coche derrapando, saltándose semáforos y atravesando vallas de acero.
ResponderEliminarMuy bonito este final, Pater. Haber formado tu tropa es una verdadera aventura...
No creas, al menos no aparenta eso de que le guste el riesgo y la acción.
EliminarMuchas gracias
La tele es el invento del maligno jajajajajajaja
ResponderEliminarPrecioso final y enhorabuena por haber cumplido tu sueño, seguro que era el más importante de todos.
jajajajaja
EliminarMuchas gracias
Anímale a escribirlos, Páterfamilias: si cada año va escribiéndolos tendrá un tesoro cuando sea mayor. Y, sí, es curioso ver cómo uno logra cosas que ni se había planteado y pierde (casi) todos los sueños de la niñez.
ResponderEliminarAyer mismo me dijo que ha perdido la lista :-(
EliminarSí, es cierto, es muy curioso
¿Lo del hormiguero lo podemos hacer los mayores? Me apunto.
ResponderEliminarOtra cosa, seguro que aún te queda un sueño: disfrutar con tu familia.
Que se cumpla, un abrazo.
Jajaja. Lo difícil será encontrar uno así, no?
EliminarMuchas gracias
Lo del hormiguero no lo haría, pobres hormigas. Y lo del paracaídas tampoco, pobres peces. Pero lo del taxi sí lo he hecho, y si es tu madre la que va en el coche no tiene muchísimo glamour...
ResponderEliminarJajajaja. ¿Así que tú has hecho lo de 'siga a ese coche'?
EliminarMe parece que Q es la bomba. Imaginación y mezcla de pensamientos infantiles y ya no tanto (buena actitud rechazando lo del paracaídas y puenting), me parecen geniales.
ResponderEliminarSi algo admiro, es tener propósitos y metas e intentar cumplirlos, dentro de un orden y sin ser muy estricto, porque lo de "el hombre propone y Dios dispone" se aprende más adelante.
Es cierto, eso se aprende más tarde y, a veces, cuesta aceptarlo
EliminarPor favor quiero que le leas mi comentario:
ResponderEliminarCuando era niña y bastante selvática, nos entreteniamos echando gasolina en los hormigueros de las hormigas culonas (enormes hormigas americanas que hacen hormigueros con túneles de kilómetros.
Como éramos los más listos del lugar, nos íbamos muuuuuuuyyyyyyyy lejos de casa para hacer semejante jueguecito y por supuesto sin que nuestros padres lo supieran.
Un día nos fuimos como a dos kilómetros de casa y empezamos a echar gasolina por el agujero. El tema era: echabas la gasolina, prendias una cerilla, la metias al agujero y cuando la gasolina empezaba a arder tapabas el agujero para que explotara por los finales de los túneles. El efecto era siempre impresionante. Se escuchaba el ruido y corríamos a ver por donde habia explotado. Bien, ese día explpotó a menos de dos metros del porche de nuestra casa por el lado de la cocina donde estban las bombonas de gas.
No hizo falta que nos castigasen.
Besazo
Ay Dolega, que se ve que no era taaaaaaaaaaan lejos de casa al lugar al que íbais.
EliminarDolega, me has dejado impactado y, obedeciéndote, le he leído tu comentario ... lo que no sé es si le has dado una idea nueva,
EliminarPues no lo veo tan loco. Quiero decir para tener 13 años. Imagina que te hubiera dicho, "uno de los sueños de mi vida es oír a la Filarmónica de Berlín en directo, otro conocer a Mandela, que debe ser una persona increíble, y el tercero poder charlar de tú a tú con Hawkings, porque en realidad su teoría del Big Ban está equivocada...". A mí me da algo, vamos. Prefiero que me diga que de mayor quiere ser "leñador, pintor y granjero". Autosuficiente el niño, toma ya.
ResponderEliminarSara: íbamos en coche, conduciendo mi hermano.
EliminarTe aseguro que era muuuuuuuuuy lejos.
Sara M, ¿cuánto tiempo? ¿Qué, estabas abriendo tu blog? ;-)
ResponderEliminarTienes razón. Si viniera diciéndome eso que escribes, me daba algo seguro
Ah, y tiene 11 años (a ver si es que no nos leemos el esquema?) ;-)
Ups, es que necesitaba la entrada aclaratoria ;p
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